Trayectorias de éxito llevan a los titulados a diferentes lugares de Europa

«Tenemos alumnos en Austria, Escocia, en Lituania o en diferentes lugares de Europa a los que les está yendo muy bien porque se sienten preparados de forma muy solvente por el bachillerato internacional», destaca Miguel Ángel Arconada.

-David Toledo. Alumno de la primera promoción, fue el primero en estudiar fuera de España, cursó Biotecnología en Escocia, también realizó la beca Erasmus en Italia y después un Máster en Microbiología. Actualmente trabaja en Novabiotics, una empresa líder en biotecnología centrada en el diseño y desarrollo de antiinfecciosos destinados a enfermedades difíciles de tratar. «Recomendaría el bachillerato internacional a cualquiera que se considere curioso a la hora de estudiar. Este bachillerato enseña a buscar y aprender lo que nos gusta e interesa, que siempre es mucho más gratificante que memorizar lo que dicen los libros de texto y punto. Durante mis años de universidad y ahora de trabajo, ha habido varias personas que me han dado la enhorabuena a la hora de escribir informes científicos, de hacer ponencias, entrevistas y de ser curioso día a día.

-Gabriel Rodríguez. Es otro de los alumnos de la primera promoción del IB en Palencia. Decidió estudiar en España, cursando el doble grado de Ingeniería informática y Estadística en la UVA. Actualmente, se encuentra realizando un máster en la Universidad de Edimburgo con una beca de Iberdrola, con vistas a realizar un doctorado. «Destacaría la capacidad crítica, la habilidad para hablar en público y la tolerancia al trabajo». «Lo que realmente te hace crecer y ser crítico es desafiar tus ideas contraponiéndolas con las de aquellos que tienen una visión del mundo diferente. Esto es algo que se aplica en todos los campos de la vida y que es particularmente relevante en ciencia, donde nunca hay que dar nada por hecho y los resultados de una experimentación te pueden llevar a cuestionarte unas hipótesis que hasta ese momento creías como ciertas. El IB trabaja con una metodología diferente, con la que realmente aprendes».

-Rubén Calvo. También fue miembro de aquella primera promoción 2012-2014. Estudió el doble Grado en Física y Matemáticas también en España y ahora mismo se encuentra estudiando el máster de Física de los Sistemas Complejos, en el centro IFISC de las Islas Baleares. «Básicamente, este programa ofrece la oportunidad a los alumnos de empezar a aprender de una manera distinta, más crítica, más humanística y más científica y también más interdisciplinar. Fomenta valores críticos y científicos que están asociados con el espíritu universitario, creo que pensar que la intención del mismo reside solo en eso es caer en un reduccionismo vago. El programa intenta ir más allá, y formar ciudadanos críticos y responsables, integrados en un mundo real y social, en el que deben interaccionar con el resto de personas a su alrededor. Creo que la forma de pensar del programa me ha permitido muchas veces dudar y criticar, y de este modo aprender más allá del horizonte de lo que se considera cierto».