Mikel silencia La Laguna en el 92

El fútbol no fue vistoso, sobre todo en la primera parte. El Becerril planteó un partido largo, de desgaste, mientras que el colista se conformó claramente con el empate desde el primer minuto, de ahí las excesivas pérdidas de tiempo del guardameta Lisardo en cada saque de puerta. A los siete minutos de juego, el Laguna avisó por medio de Monte, uno de los delanteros, que disparó demasiado alto. David contestó a esa acción al caracolear y buscar el recorte hacia dentro para disparar buscando el segundo palo, y Rodri evitó el gol.

El primer tiempo tuvo su anécdota en el minuto que estuvo interrumpido el juego por la sorprendente presencia de un dron en la grada. Al igual que todos los espectadores, la aeronave sin tripulación se quedó sin ver goles durante el primer tiempo. Las sensaciones fueron realmente positivas para el Becerril, que, sin hacer un juego brillante, no sufrió en defensa.

No hubo sustituciones al paso por los vestuarios, pero el Laguna sí había acometido una permuta durante el primer tiempo, pues Davo relevó a Chuchin. La segunda parte tuvo mejor nivel del Becerril, subiendo las revoluciones y hundiendo atrás al rival, pese a lo cual el Laguna acarició hasta el final la suma de su segundo punto de la temporada. Kuko amenazó mediante un disparo que salió cerca del palo en el minuto 61. Pablo, Isma y Conde se sumaron poco después de forma simultánea al duelo para intensificar el control visitante. Sin embargo, después de un error de la defensa del Becerril, el revulsivo Davo se encontró mano a mano ante un imperial Sevi, que despejó a saque de esquina el lanzamiento en la oportunidad más clara de todo el encuentro para deshacer las tablas iniciales. El guardameta del Becerril apareció cuando más se le necesitó y logró mantener así el empate hasta el tiempo añadido.

Amado y Guti fueron los dos últimos recambios del entrenador Francis Olea. Entonces, ante un Laguna muy castigado físicamente, el portero Sevi puso rápidamente el balón en juego con la mano y la acción pasó al costado izquierdo, por donde progresó Kuko, que colocó un caramelo en forma de centro y Mikel, de cabeza al primer palo, envió el balón hacia el segundo, batiendo a Lisardo en el minuto 92. Estallaron de júbilo los más de 50 aficionados del Becerril desplazados a la localidad vallisoletana. Fue un triunfo trabajado y merecido para el Becerril, que encadena tres victorias.