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laura linacero
Domingo, 9 de mayo 2021, 18:28
La cuna del aprendizaje para los estudiantes que el día de mañana salvarán vidas es, en Palencia, la Escuela Universitaria de Enfermería. Un centro que ... recoge la profesión más presionada en los últimos meses y que lanzó a un mercado laboral cuanto menos intenso a 97 alumnos el pasado año. Las peculiaridades de la pandemia no solo se reflejan en el ámbito profesional, sino también en el ámbito educativo. Actualmente, con 413 estudiantes matriculados, el panorama es aún de incertidumbre aunque marcado por las pautas de la crisis sanitaria. «No sabemos cómo va a evolucionar, pero en principio continuaremos con la enseñanza bimodal», explica José Antonio Iglesias, director de la Escuela de Enfermería.
La formación 'on-line' ampliamente aplaudida en otras disciplinas, resulta algo complejo llevarla a cabo cuando hablamos de ciencias de la salud. De hecho, tal y como afirma el director «en España no hay facultades que ofrezcan la modalidad completamente virtualizada para este tipo de grado». No obstante, las exigencias del guion han hecho que se haya introducido esta variante para la parte teórica de tal forma que rotativamente una tercera parte de los alumnos siguen la clase de forma presencial, y el resto lo hace en directo desde su casa. Iglesias reconoce que «motivar al estudiante en su aprendizaje a través de la formación 'on-line' es el mayor de los retos».
A pesar de esta incorporación, la prioridad de la dirección sigue siendo reforzar la parte práctica, ya que «incidir en la idiosincrasia de las personas y el contacto son imprescindibles para nosotros». Precisamente, esos valores son los que, según Iglesias, han distinguido a este centro respecto a otros a nivel nacional. «La transversalidad y humanización en la docencia a la par de la atención individualizada se trasladan después en el hacer del profesional», asegura. Mantener las habilidades en cuanto a comunicación y empatía en una profesión tan relacionada con el cuidado, es una de las premisas que tratan de «mostrar y demostrar con el trato a los estudiantes día a día».
Por tanto, los esfuerzos tanto por parte de la dirección de la Escuela como por parte de la Diputación de Palencia, propietaria del centro, han ido orientados a que la pandemia trate de ser lo menos invasiva posible para la formación de los alumnos. Para ello, la administración provincial ha dotado de material para adecuarse a las condiciones en favor de los estudiantes. Una relación que el director considera muy ventajoso dada la situación, aunque anhela una mayor integración con la Yutera ya que reconoce que «estar fuera del campus universitario tiene muchas limitaciones en cuanto al enriquecimiento que el alumnado y el profesorado pueda obtener del contacto con otros compañeros».
Desde luego, si alguna situación ha servido para reflejar los valores de la profesión ha sido la que envuelve al mundo desde el pasado año. El director lamenta que esta pandemia haya servido para visibilizar la labor de las enfermeras como profesionales de la salud, ya que «no nos acordamos de ellas hasta que no lo necesitamos». No obstante, trata de extraer la parte positiva y concibe estas circunstancias como «una oportunidad para las enfermeras en general y las facultades en particular para abrir un horizonte atrayente».
Unas posibilidades que parecen dibujarse en el futuro y que los nuevos estudiantes comienzan a percibir. En este curso, 97 alumnos se han matriculado en la escuela de enfermería, de los cuales el 40% viene de otras comunidades, sobre todo de Navarra y el País Vasco. La actitud optimista de las nuevas incorporaciones, tal y como explica José Antonio Iglesias, se basa en las ganas de «coger este tren y devolver a la sociedad todo el potencial que tienen». No obstante, la excepcionalidad de esta situación supone una mezcla de sentimientos para los novatos que se refleja por un lado «en el temor, y por otro en más ganas de formar parte del mercado laboral con respecto a otros años».
La situación es diferente para los estudiantes que están terminando ya su formación y que se enfrentan a los últimos meses de prácticas. Los nervios previos a enfrentarse a una realidad que aún no conocen del todo puesto que se ha limitado la instancia de los estudiantes en las unidades de pacientes covid. «Hay una reivindicación por parte de los estudiantes y facultades, ya que creemos que es adecuado que los alumnos conozcan esta situación puesto que en unos meses serán trabajadores en estas plantas», explica José Antonio Iglesias.
Sin embargo, reconoce también que «tener un estudiante a tu cargo también exige formarlo, y es un extra para los profesionales que ya están dando el 100%». Por ello, desde la Escuela de Enfermería tratan de cubrir esta carencia con seminarios donde se muestra los protocolos básicos de actuación impartidos por profesionales de la salud que están en activo.
Las instrucciones otorgadas para impedir que los alumnos puedan completar las prácticas clínicas en plantas covid exige por parte de la dirección reorganizar la oferta. Así, en función de las plazas disponibles y dependiendo de la situación epidemiológica se va dando cabida a la formación práctica del alumnado. «Hay hospitales que tenían muchas plantas covid y en ese caso, la posibilidad de que los estudiantes pudieran progresar haciendo sus prácticas eran mucho más limitadas. Según se han ido liberando plantas, hemos dado entrada a más estudiantes», subraya el director.
La mirada de la Escuela Enfermería está dirigida en mantener la esencia, aún más en este año que cumple 50 años. Enmarcado en un tiempo de celebración, esta misma se mana se ha celebrado la VII Jornada CREAndo Enfermería de manera virtual.
Las referentes para los jóvenes que hoy cursan el grado de Enfermería son los propios profesionales que se enfrentan a la batalla diariamente. Ahí ponen la mirada los estudiantes, y ahí fijan su objetivo laboral. La VIII Jornada de CREAndo Enfermería fue diseñada para fomentar el desarrollo humano y científico en el ámbito de la salud, y en esta crisis sanitaria más que nunca se convierte en un evento imprescindible para los alumnos.
Al igual que ellos, Noelia Colomer, hace ocho años comenzaba en la Escuela de Enfermería con la ilusión a flor de piel. Hoy, se encarga del cuidado de paciente covid y familiares en una de las plantas habilitadas en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla en Santander. «Apenas podíamos tener contacto con el paciente, y eso también era muy duro para nosotras porque el acompañamiento es el alma de la enfermería», así define la palentina la experiencia vivida en esa unidad tan distinta a lo que antes conocía.
Entre lágrimas recuerda la historia de una hija que perdió a su padre y agradecía el trabajo de las enfermeras a través de una carta. Escuchar su testimonio supone entender lo imprescindible que ha sido y es la enfermería, por muy intenso que sea el camino. Para hacerlo más llevadero, el consejo que transmite Noelia Colomer a los alumnos que se preparan para esta profesión es que «se apoyen en los compañeros y formen un equipo, porque eso les ayudará a sobrellevar la dureza del trabajo».
No solo es la clave para esta enfermera, sino que Silvia Llorente, trabajadora sanitaria y alumna de enfermería, refleja la importancia del compañerismo narrando lo que ocurría al acabar un turno. «Hemos terminado muchos días llorando y con miedo, y entre nosotros nos apoyábamos porque sabemos que lo hemos dado todo, y lo que no hemos dado es porque no lo teníamos a nuestro alcance», resume orgullosa. Hoy, la vocación hacia su profesión le ha hecho matricularse en el grado de enfermería justificando su decisión como «amor hacia mi trabajo».
La sensación de haber explotado todas sus posibilidades para ponerse al servicio de la sociedad es lo que reconforta al profesional. Juan Bartolomé Calvo, enfermero rastreador, asegura con orgullo que a pesar de que «la pandemia nos ha estrujado, hemos podido responder a ello». En una situación donde la presión ha sido el motor de actuación, reconoce que es «el momento de que la enfermería se de a conocer y abrirnos a las nuevas posibilidades que nos ofrezca esta situación».
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