Nace una nueva cría de bisonte europeo en la reserva de San Cebrián

Una nueva cría de bisonte europeo ha nacido en la reserva de San Cebrián de Mudá, en la Montaña Palentina, con lo que son ya trece los ejemplares y se afianza la apuesta del primer centro de conservación del bisonte europeo de España. La manada salvaje de siete bisontes europeos procedentes de los bosques polacos de Bialowieza y Pszczyna, que llegó en junio del año 2010 al norte de Palencia, hoy cuenta ya con trece animales de esta especie, para satisfacción de todos los visitantes que se acercan a esta reserva, el primer Centro de Conservación del Bisonte Europeo de España.

«Ojalá que sea una hembra», señala Jesús González, alcalde de San Cebrián de Muda, el Ayuntamiento palentino que gestiona esta reserva. Y es que todavía es pronto para saberlo, habrá que esperar unos días a que la madre «relaje la guardia» y haga «la presentación oficial» de su retoño al resto de la manada y «deje que nos acerquemos a verla», apostilló González. De momento, ayer se vio a la cría junto a su madre, Kastorama, una de las hembras que llegaron a Palencia en 2010 y que ya ha dado otra alegría a esta reserva, con el nombre de Cielo.

«Hace unos días que la hembra se separó de la manada y nos imaginábamos que podía ser porque iba a parir una cría», detalló González con satisfacción, de acuerdo con la experiencia que le han dado cinco años de observación y cuidado de estos animales en peligro de extinción.

Cada nacimiento en esta reserva, y ya van seis (aunque dos crías no sobrevivieron) afianza la recuperación de esta especie y hace aumentar más la esperanza de desarrollo de este municipio, que ha visto en sus bisontes una oportunidad para fijar población y luchar contra la despoblación. Lo que sí es seguro es que su nombre empezará por la sílaba Ci, como Cielo, Ciprés y Cierzo, y todas las crías que han nacido en esta reserva, por exigencias del parque polaco del que proceden sus padres. «Es como una especie de matrícula», bromea Jesús González.

Con este nuevo alumbramiento, la reserva de bisontes europeos de San Cebrián de Mudá suma un nuevo atractivo a este centro de conservación, que visitan cada año 5.400 personas. No en vano, es el primer centro de conservación del bisonte europeo que acogió en España una manada salvaje de bisontes, que se crían en estado de semilibertad en veinte hectáreas de pradera y robledal en plena Montaña Palentina, a 4.000 kilómetros de distancia de su hábitat original.

Desde su llegada, estos animales prehistóricos han demostrado una gran capacidad de adaptación a su nueva casa, y se han convertido, además de en un gran atractivo para el turismo, en estupendos gestores del territorio, actuando como auténticas «desbrozadoras» naturales que se comen todos los matorrales y se alían en la lucha contra incendios.