Prever contra proveer
Con P de Palencia ·
Vivimos en un sistema que contiene elementos caóticosPresupuesto, ese documento que elaboran las administraciones y las empresas con el ánimo de cumplirlo y que cuando termina el periodo para el que se ... ha elaborado hay que explicar por qué no pudo llevarse a cabo. Esa podría ser una más de las definiciones del término. En el fondo, cuando se elabora un presupuesto siempre se hace una previsión de los ingresos que se van a obtener y un cálculo de los gastos que se producirán en ese mismo tiempo. Y la principal dificultad de esta elaboración es el hecho de que vivimos en un sistema que contiene elementos caóticos y la partida que siempre es difícil imaginar es esa que además, suele quedar fuera: imprevistos.
Los elementos fuera de control, esos que no se pueden imaginar, son en ocasiones los que más provocan que los cálculos no se cumplan, sobre todo cuando el presupuesto está muy ajustado, ya sea en el capítulo de los ingresos (que suele tender al optimismo) como en el de los gastos (que por naturaleza tiende también al optimismo). Total, que pese a lo imaginado, los ayuntamientos suelen llegar a fin de año con un déficit que, o bien se esconde debajo de la mesa de «esto lo pagaremos al año próximo» o se queda ahí, en un cajón, para que lo encuentre el siguiente responsable de ese departamento.
Los responsables del Ayuntamiento de Palencia han sido esta vez prudentes y ya han remarcado al presentar el documento de lo que se espera ingresar y gastar el año próximo que se trata de una previsión, o sea, que como le pasó a la lechera, todo dependerá de que el jarro de leche no se derrame y del precio de los animales cuando los compre en el mercado. Prevén los munícipes sus cuentas bajo la idea de que las transferencias del Gobierno y de la Junta proveerán lo calculado. Veremos si aciertan.
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