Efecto gravitatorio

Muchos palentinos reciben estos días en sus teléfonos móviles y también en sus correos electrónicos mensajes de felicitación por la festividad y al tiempo, el recordatorio de que, si ese día no tienen otra cosa que hacer... bien podrían acercarse para conocer las últimas ofertas en electrodomésticos o en muebles, y por supuesto, en ropa y complementos. Este año, la invitación se traslada a la jornada del lunes, festiva en la capital palentina pero laborable en el resto. Y ahí es donde desde hace muchos años se aprovecha. Porque no son pocos los consumidores locales que se deciden a disfrutar del asueto en un entorno cercano y en el que pueden dedicar el día a las compras. Es el efecto gravitatorio de una oferta más extensa y que además cuenta ese día con la ventaja de no tener competencia directa. Desde hace años se intenta contrarrestar el efecto con actividades atractivas que inviten al consumidor a permanecer en Palencia, con eventos como la matanza o la feria que intenta que sean los productos de otras zonas los que ese día se presenten ante los palentinos. La atracción entre Valladolid y Palencia tiene estas consecuencias. Hay empresas que se interesan por instalarse en la vía de comunicación entre ambas porque facilita la relación con el área industrial existente en esta zona bien situada también con relación a Burgos. Y las facultades universitarias están más cerca que aquelllas a las que acuden alumnos en Madrid. A cambio, cada febrero, llega la marea de ofertas.