Rocío Flores camina con dificultad tras someterse a una liposucción

Rocío Carrasco ha vuelto a someterse a una nueva operación de estética. En este caso a una lipoescultura para eliminar grasa localizada de diferentes partes de su cuerpo y que, según se ha visto en unas imágenes, no lo está llevando demasiado bien.

Fuentes cercanas a la joven han señalado que no fue una intervención sencilla, ya que hubo pequeñas complicaciones que hicieron que la influencer estuviese más de tres horas en quirófano.

Horas después Rocío recibía el alta con Olga Moreno -que también se sometió a una lipoescultura- y ambas ponían rumbo a la casa de un amigo en Madrid, donde permanecerán los próximos días, ya que tienen que guardar reposo absoluto una semana.

Posteriormente podrán comenzar a moverse, aunque no será hasta dentro de un mes cuando puedan hacer una vida más o menos normal, ya que la piel tiene que volver a unirse al músculo - una vez extraída la grasa - y es un proceso bastante doloroso.

Tanto es así que este miércoles, cuando Rocío y Olga han acudido a la clínica en la que se operaron para someterse a una revisión médica y comprobar que su evolución va por buen camino, ha llamado la atención la expresión de dolor de la hija de Antonio David Flores, de tal modo que ha necesitado ayuda para desplazarse y su rostro serio dejaba ver el complicado momento que está atravesando tras la operación.