«Tanto Podemos como Donald Trump son producto de esta crisis tan larga y puñetera»
Para Antonio Garrigues Walker, «la incertidumbre política no atrae a los inversores, pero ahora mismo ningún país está libre de inquietud»
Ángel Blanco Escalona
Viernes, 18 de marzo 2016, 13:05
Político, jurista, fundador del despacho de abogados más famoso de España y portador de un apellido que se ha convertido en toda una marca, Antonio Garrigues Walker pasó por Valladolid para ofrecer una conferencia en el Aula CEU José Berbel con el sugerente título de Sociedad civil, calidad democrática y futuro económico. El presidente de la Fundación Garrigues y la Cátedra Garrigues de Derecho Global en la Universidad de Navarra, destacado experto legal en inversiones extranjeras en España, defiende que el país «posee áreas con un potencial de desarrollo espectacular».
La sociedad civil española, ¿está viva o está un poco adormecida? ¿Le parece que se hace oír... y que se le hace caso?
La sociedad civil en España, realmente, nunca ha sido un dato decisivo en la sociología. La capacidad española para unirse y defender causas determinadas no ha sido nunca muy grandes. Eso se ha debido en parte a que el carácter latino es como es, pero también al hecho de que no ha habido leyes que favorecieran este tipo de asociación o fundación y también al hecho de que al sector público nunca le ha interesado mucho que hubiera una sociedad civil demasiado alerta y demasiado viva. Noto que últimamente las cosas están empezando a mejorar. En parte porque la sociedad se ha dado cuenta de que el estamento político necesita de verdad la referencia de la sociedad civil y que esta es la que genera la calidad mínima que debe tener una democracia, o será algo muy pobre.
¿Cree que están los partidos demostrando madurez ante la nueva situación que tienen delante?
El estamento político, por una serie de razones, no se está adaptando a los tiempos. Es cierto que la situación no es la más favorable que uno pudiera imaginar, pero a mí me gustaría vender el mensaje, en el que creo firmemente, de que España no es el único país del mundo donde se está viviendo un problema como el que estamos sufriendo aquí. La crisis se ha convertido en la más larga, puñetera y profunda que ha habido, probablemente, en la historia de la humanidad. Llevamos ya ocho años y la verdad es que en estos momentos no hay ninguna certeza de que vayamos a volver a un periodo de crecimiento rápido ni a corto, ni a largo plazo. Incluso se habla de una nueva recesión. Eso genera reacciones políticas de carácter populista. En Estados Unidos están realmente convencidos de que el señor (Donald) Trump sea imparable e invencible. Y es un personaje de mucho cuidado.
¿Ve entonces a Trump como una consecuencia de la crisis, como Podemos, o Bernie Sanders?
SI, lo mismo pasa en el lado Demócrata, en donde un judío de 74 años, que para EE UU es una edad... no muy joven y lo digo para no meterme conmigo mismo... está manteniendo un duelo con la candidata oficial del partido. Y este hombre (Bernie Sanders) lo que vende es anticapitalismo, anti Wall Street y su protesta contra la desigualdad social en los Estados Unidos, que es el país más desigual del mundo rico. Quiero decir que hay un populismo de derechas y de izquierdas. En Irlanda hemos visto que la coalición de izquierda no ha ganado, tampoco la derecha, y están en un impasse político muy similar al de España. En Francia, el tema del refugio está generando un populismo en donde la señora Le Pen gana todas las contiendas electorales y en algunas de ellas se han tenido que unir la derecha y la izquierda para evitar un triunfo total. De modo que no nos sorprendamos ni nos preocupemos demasiado. Lo que ha pasado es lo que ha pasado y es que los partidos clásicos, por su gran culpa, por su inmovilismo, por el fenómeno de la corrupción, por su falta de cercanía a la ciudadanía, han dejado un hueco. Yen el mundo político sucede como en el económico:si alguien deja un hueco, viene alguien y lo ocupa. Y ha sido la gente joven, que es la que nutre de votos tanto a Ciudadanos como a Podemos.
¿Cree que esta gente joven está suficientemente formada, preparada y con sentido de responsabilidad como para, además de llenar huecos, gobernar un país?
Hace tiempo yo intenté fundar un partido político y fue un fracaso maravilloso. Cuando hablo con gente de estos nuevos partidos les recuerdo que tener ideas es fácil, pero que llega un momento en que hay que vertebrar esas ideas en un partido, y eso genera problemas porque las ambiciones, los juegos de poder, los personalismos y los antagonismos en el mundo político empiezan a operar inmediatamente. Tanto Ciudadanos como Podemos van a pasar una fase difícil. Veremos si acaban logrando vertebrarse, porque es algo muy complejo. UPyD lo intentó y no lo logró.
Le he escuchado decir que la corrupción en España no es un problema muy grave, o no más que en otros países, ¿lo sigue pensando?
Con la corrupción pasa, en primer lugar, que en un porcentaje del 70% u 80% pertenece a una época anterior. No es de ahora.
Eso no lo sabemos, ¿no? Tampoco podemos estar seguros de que dentro de siete años no vayamos a descubrir que ahora también la había...
También podría ser; pero lo que creo que está pasando es muy bueno de cara al futuro. No digo que todos, pero una gran mayoría de los corruptos están procesados, imputados o pagando ya sus penas. Se ha demostrado que los medios de comunicación han cumplido con su papel y eso es muy educativo para la ciudadanía y, en especial, para la gente joven. Que tomen nota de que la corrupción y el crimen no pagan y no merece la pena arriesgarse.
La sucesión de casos parece siempre tener como protagonistas a políticos, pero para que haya corrupción hacen falta corruptos y corruptores. Los que corrompen, ¿se están yendo de rositas?
Tiene toda la razón. En Transparencia Internacional, donde he trabajado mucho tiempo, teníamos dos listas: países corruptos y países corrompedores. En efecto, en España ha habido empresas que no han estado limpias y que han sido objeto de investigación e imputación.
¿Y los ciudadanos han sido, o están siendo, contundentes contra la corrupción?
La sociedad no da una respuesta estructurada. Habría que establecer un sistema de protesta más activo y organizado. La gente debe darse cuenta de que la corrupción no se elimina de raíz en un mes. Hay que generar una nueva cultura cívica. En el mundo nórdico nadie pregunta con IVA o sin IVA;eso se ve como un delito grave que ofende a toda la sociedad. En España, hasta hace poco no existía el delito fiscal. Desde que se ha creado ha mejorado el cumplimiento de las obligaciones. Es algo que hay llevar al sistema educativo para, poco a poco, crear una nueva realidad.
Como asesor de inversores extranjeros... no es que el mundo del capital esté como para tirar cohetes... pero ¿ve a España como una marca atractiva?
España sigue siendo atractiva porque tiene potencial de crecimiento. Posee áreas que pueden tener un desarrollo espectacular. La agricultura, productos para la salud, el mundo tecnológico, el científico... una serie de áreas donde España está retrasada y se pueden hacer muchas cosas. Es cierto que la inestabilidad política no es un factor favorable para la inversión pero, insisto, ¿qué país no tiene hoy ningún problema político? Las inquietudes quegenera que un hombre como Trump pueda llegar a presidente son muy serias.