El Tordesillas tropieza ante el colista en Las Salinas

El Atlético Tordesillas cayó por la mínima ante el colista del campeonato. Y es que los de Santi Sedano vieron cómo el solitario tanto de Bruju en la primera mitad les condenó a la derrota ante el Almazán en un partido en el que de no ser por las sensacionales intervenciones del meta soriano el resultado hubiera sido bien distinto.

De inicio, los futbolistas rojiblancos arrancaron bien plantados sobre el terreno de juego y pronto dispusieron de las primeras ocasiones de peligro sobre la portería defendida por Álvaro. Un guardameta que pronto demostró el porqué de su titularidad, ya que de no ser por sus buenas intervenciones los locales habrían inaugurado el marcador mucho antes.

Sin embargo, el Almazán no se amilanó en la cancha del todopoderoso Tordesillas y su técnico planteó un partido en el que por momentos los sorianos plantaron cara a su rival. Tanto es así, que mediada la primera mitad los futbolistas visitantes consiguieron ponerse por delante en el electrónico por medio de un soberbio disparo lejano de Bruju ante el que nada pudo hacer el meta rojiblanco Farolo.

Con ventaja en el marcador el Almazán se asentó sobre el terreno de juego, mientras que el conjunto tordesillano adelantaba ligeramente sus líneas en busca del gol del empate. Una situación en la que los sorianos se mostraron muy cómodos a pesar de las constantes acometidas ofensivas de los locales.

Tras el paso por vestuarios, la tónica del partido apenas sufrió variaciones y ambos técnicos continuaron con sus planteamientos iniciales. Sin embargo, los cambios no tardaron en llegar y los futbolistas de refresco dieron nuevos aires a sus equipos. La entrada de Héctor por parte visitante dio oxígeno a los suyos en la zona ancha del campo, mientras que la del brasileño William en los locales ofreció mayor mordiente a su ataque.

Poco a poco, el dominio del Tordesillas se fue acrecentando y su cerco sobre la portería soriana fue cada vez mayor. Fue entonces, al igual que en la primera parte, cuando emergió la figura del portero del Almazán, ya que las acertadas intervenciones de Álvaro evitaron que su equipo encajara ningún gol a lo largo de los noventa minutos de juego.

En el tramo final del choque William tuvo en sus botas la ocasión del empate por medio de un remate que una vez más neutralizó el guardameta del Almazán en el que estuvo a punto de convertirse en el tanto de la igualada en un partido en el que los locales pecaron de falta de precisión en los metros finales ante un equipo que se adelantó en el marcador y que supo administrar su renta en lo que restaba de partido.