Tierno solomillo al roquefort

Precisamente esta última propuesta es una de las más conocidas, en salsa de queso roquefort aunque se puede utilizar cualquier otro queso azul. En Castilla y León la producción quesera ha adquirido un reconocido prestigio dentro del sector. Así que si hay posibilidad se puede utilizar el famoso queso azul de Valdeón IGP (Picos de Europa) que hace tres años, en 2017, fue reconocido con el primer premio en el Concurso Internacional de Quesos azules celebrado en Cantabria.

En bares y restaurantes se ha adaptado esta receta al formato de tapa, así pues, se puede pedir una tapa de solomillo al roquefort que en algunos lugares lo presentan como mini bocadillo. En menú o carta, sin embargo, es una buena elección como plato principal o segundo plato.

Sencillo y con pocos ingredientes prepararlo en casa no llevará mucho tiempo. Es una sugerente propuesta para estos días para quienes sean amantes de la buena carne y de untar el pan en la salsa. Para comenzar es necesario calentar una sartén donde se les dará un par de vueltas a los medallones de solomillo de ternera. De esta forma, se marca la carne y quedará más tostado por fuera mientras que su interior quedará más tierno. Dependiendo del gusto de cada uno, como alternativa para quién prefiera la carne bien hecha, se pueden poner unos minutos al horno.

Por otro lado, en una cazuela se van deshaciendo los trozos de queso con la ayuda de una cuchara para que no se pegue. Se le irán añadiendo con lentamente la nata para que se vaya integrando y una pizca de sal y pimienta. Será cuestión de dos o tres minutos que esté la salsa lista. Si se busca un sabor más fuerte se le pueden añadir unos trocitos de queso una vez servido.

Es un plato que se sirve caliente y recién hecho. Así que se disponen los trozos de solomillo en un plato y se napan con la salsa. Cabe también la posibilidad de cocinar un par de minutos antes de ser servidos los filetes en la cazuela con la salsa de queso para darle un sabor más intenso.