Los 'nuggets' de Álex (5 años): filetes de pollo con formas divertidas

Álex Gutiérrez tiene cinco años y vive en Aranda de Duero (Burgos). En estas semanas sin salir de casa por las medidas restrictivas marcadas por la crisis del coronavirus, ha hecho bizcochos, galletas de jengibre y otras de sus especialidades, porque el pequeño es un niño muy activo en la cocina. Más allá del dulce, su plato salado preferido son los 'nuggets' o pechugas de pollo con formas divertidas. Letras, dinosaurios, estrellas, formas geométricas… Con moldes o con las manos y la imaginación propia, se puede moldear el pollo al gusto del cocinero, incluso escuchar los deseos de los comensales.

«Hemos hecho nuggets en familia, les hemos dado formas muy chulas», afirma orgulloso Álex con el resultado de su obra culinaria. Para llegar hasta ello, ha tenido que pasar una amena tarde en la cocina. Comienza colocando en un cuenco la rebanada de pan de molde sin corteza para que se empape con la leche. Más tarde, se agrega el queso de crema, la pechuga de pollo ligeramente picada y un huevo. Más tarde se salpimenta.

«Hasta ese punto lo hacen los niños solos, luego se necesita la ayuda o supervisión por parte de un adulto para mezclarlo bien con la batidora hasta que la masa esta homogénea», aporta Erika, la madre del pequeño. Con la masa preparada, se pone pan rallado para obtener una textura que permita trabajar con las manos y dar formas, poniéndole mucha imaginación. «¡Estos me encantan!», dice Álex con las manos -nunca mejor dicho- en la masa.

Una vez hechas las formas, se pasan por harina, huevo batido y pan rallado. Se vuelve a necesitar ayuda de los adultos para freír con cuidado por los dos lados en una sartén con aceite de oliva virgen extra. Cuando están dorados, se apartan del fuego y se depositan sobre papel de cocina para que escurran. «¡Me han quedado genial!», trabajo bien hecho.