«Es bonito tener músicos en la banda que no habían nacido cuando empezamos»

La pasión por la música y «el ser personas antes que músicos» son las claves de Triquel, la banda que celebra su 25 aniversario en la Plaza Mayor de Valladolid (21:00h.) mañana. Así lo confiesa su cantante y guitarrista Juan José Cartón, músico vallisoletano que ve ahora cómo la formación de su banda se regenera con nuevas incorporaciones, a la vez que choca la mano con el buen recuerdo de antiguos compañeros. Aquelarre (1996) Bichos raros (2002) y Sin hacer ná (2008) son de momento, la obra de una banda que se ha prodigado más en la carretera que en los estudios. Durante los noventa, Triquel fue una de las bandas más activas de nuestra ciudad tocando en festivales del norte y de Portugal. Mañana el grupo da cuenta de su historia en una celebración con sorpresas. El futuro del grupo se presenta en forma de una próxima grabación.

1991-2016. ¿Qué sensación les produce mirar atrás y repasar un primer cuarto de siglo de vida?

Sensaciones buenas, por supuesto. La química en el grupo está estupendamente, tanto con los nuevos como con los que se fueron. Nos produce una sensación especial ver que tenemos ahora en el grupo a compañeros que no habían nacido cuando nosotros comenzamos. Eso es algo muy bonito y casi diría que indescriptible.

¿Viene más preparada esta nueva generación de músicos? ¿Notan alguna diferencia sustancial con los jóvenes músicos vallisoletanos de los primeros años 90?

Su mayor preparación no es lo único que los distingue. Tienen además una actitud muy buena y madura para lo jóvenes que son. Me alucina su madurez y su facilidad para encajar el rollo intergeneracional que hay ahora en la banda. Quizás los más viejos del grupo seamos los menos maduros.

¿Les impone volver a subirse mañana a la Plaza Mayor?

Pues sí, claro. Es la segunda vez que actuamos en nuestra plaza mayor. La primera fue con Ixo Rai en 1999. Aunque dan previsiones de lluvia, nosotros estamos muy emocionados. Somos de arriesgar poco, así que hemos preparado un directo con mucha caña, fraguado de muchos directos sin apartarnos de un guion que pensamos que gusta.

Llevan toda una vida dedicándose en cuerpo y alma a la música celta. ¿Qué satisfacciones les ha dado la unión con este estilo?

No hemos sido banda de investigación, sino más bien hemos sido y seguimos siendo una banda apasionada por la música celta. Es la música que nos enamoró. Ya sabes una melodía animada, una base potente y a disfrutar. Además es un género que fusiona fácilmente con la música moderna. Nuestra vida no sería lo mismo sin la música celta.

¿Esperaban durar tanto haciendo este tipo de música?

Yo creo que ni esperábamos ni dejábamos de esperar. Simplemente, nos dejábamos llevar. Lo que nos ha hecho seguir adelante ha sido la ilusión y el ser un grupo de personas antes que un grupo de músicos. Nos llevamos bien y hay una motivación. Nos sigue ocurriendo ahora. Hay gente en el grupo que después de 25 años sigue viniendo por la noche a ensayar tras una jornada laboral y con unos críos en casa. Eso sí que es seguir teniendo ganas e ilusión por esto.

Carteles esperanzadores

En estos momentos hay que recordar lo mejor que os habéis llevado en el camino. ¿Con qué instantes se quedan de su carrera hasta la fecha?

Imagino que cada uno de nosotros tendrá un momento distinto. Solemos coincidir en lo bien que estuvo el festival del Partido Comunista Portugués. Fue el evento más grande en el que hemos tocado. También recordamos varios festivales en Galicia y en Asturias tocando en la naturaleza, al aire libre en ambientes célticos llenos de magia. Hay momentos que no tienen precio.

¿Cómo ven la ciudad actualmente en lo referente a música y oportunidades de expresarla?

Con bastante esperanza. Se están haciendo cosas para que haya menos limitaciones y hay una mayor apertura en la realización de conciertos. No hay más que ver la cantidad de carteles de conciertos que hay en la ciudad.

Tras soplar las velas, ¿hay ya planes concretos en el futuro inmediato de Triquel?

Tenemos en verano una serie de conciertos muy majos como por ejemplo el Festival Intercéltico de Avilés o el Suaga Folk de Colindres en Cantabria. Y por supuesto, nos queremos poner a grabar lo antes posible. Hay mucha labor de local con el cambio de componentes y el repertorio actual. Tenemos ganas de plasmarlo en el disco.

¿Esta savia nueva que hay en Triquel contribuirá a alterar la pureza celta del grupo?

El respeto a la música celta siempre está ahí. Triquel es ciertamente un grupo asambleario y los nuevos músicos vienen con muchas ideas y talento. Todo esto se notará en los próximos pasos que demos. Hay ganas de sacarlo adelante.