La viabilidad del proyecto y la pasión, «claves para enamorar al inversor»

Alentia Capital Alternativo busca inversores privados que inviertan en un proyecto, una vía de financiación alternativa de la banca tradicional. La gran diferencia con el préstamo tradicional radica en que, en el caso de la banca, es necesario devolver el dinero, mientras que en una sociedad de capital, los inversores entran a formar parte de ella. El banco no se meterá en la gestión del negocio pero los nuevos socios sí pueden pedir explicaciones o, cuanto menos, tendrán más conocimiento del negocio. En este sentido, para optar a este tipo de financiación, es necesario constituir una sociedad. La figura de un autónomo, por ejemplo, queda excluida.

Otra opción de financiación para proyectos son las plataformas ‘crowdfunding’. Cid aclaró que este tipo de vía financiera es exclusiva para iniciativas de base digital que buscan grandes capitales de inversión. Por último, existe una cuarta vía de financiación que son las subvenciones. En este sentido, Cid apuntó a la necesidad de estar atento a ellas, pero no contarlas como una vía habitual de financiación, dado los tiempos largos en los que se mueve y sus condiciones cambiantes.

Una de las grandes preocupaciones de los alumnos de STARTinnova es cómo lograr la respuesta afirmativa a su proyecto. El ‘sí’ del banco o del inversor. Javier Cid indicó la importancia de tener una idea clara del negocio, un negocio que debe solventar una necesidad existente con una ventaja competitiva nítida respecto a la competencia, y que llegue, de manera fácil, al usuario o consumidor en el momento adecuado. «El inversor mira, además, en la posibilidad de que el negocio sea escalable, es decir, que tenga capacidad de crecer», apuntó.



No obstante, el punto más importante es que el proyecto sea viable, que tenga un equipo solvente y resolutivo, que se tenga claro el campo de actuación y lo que se quiere crecer en los próximos años. Respecto a las formas de la presentación del proyecto, Cid indicó que lo importante es ser capaz de transmitir la idea de forma sencilla y llana. Si se trata de un tema muy técnico, toda esa información especilizada se preguntará después, si es que el inversor o el responsable bancario desean más información.

En Alentia se analizan alrededor de 100 proyectos al año y solo se presenta a sus inversores el 10%. Cid afirmó que hay una norma general y es «entrenar», esto es, «que lo ensayen con sus amigos, con su profesor o incluso con Alentia, para coger esa destreza y que la persona que les escucha les dé su valoración». «La pasión en el proyecto es fundamental para enamorar a ese inversor», añadió. Tener una mente abierta también es esencial. Después de un ‘no’ puede haber una idea nueva, una mejora en el proyecto que se desea emprender. «Fracaso es una palabra demasiado contundente como para aplicarlo a una persona». Aquí, Javier Cid aconsejó ser analítico. Analizar en qué se ha errado, para refundar el proyecto o comenzar uno nuevo. Ante la pregunta de cuál es la mejor manera de financiar un proyecto empresarial, Cid apuntó que «hay que ser muy claro con los emprendedores, las empresas al principio se financian con las ‘3 F’: Familia, amigos y locos (del inglés, ‘family, friends and fools’)». El entorno cercano del emprendedor es la primera fuente de financiación. Una vez iniciado el negocio, la empresa tiene más capacidad para acudir a un banco o a un inversor privado.



STARTinnova es un proyecto impulsado por El Norte de Castilla. Cuenta con el patrocinio del Instituto de Competitividad Empresarial de la Junta de Castilla y León y la colaboración del Ayuntamiento de Valladolid y Palencia, la Diputación de Segovia, Ibermaq y AMRI Crystal Pharma. Cicrosa, Fundación Michelin y SMP participan como empresas mentoras.