Los sindicatos rechazan la nueva oferta del ERE de Unicaja y convocan una protesta en Valladolid el día 23
Marcan como línea roja la voluntariedad en la salida de trabajadores, que la entidad plantea a partir de los 55 años
La representación sindical de UGT, CIC y CSIF en Unicaja Banco considera que la mejora de condiciones ofrecida por la entidad resulta insuficiente y mantiene ... las concentraciones de protesta, que el martes comenzaron ante las sedes de Unicaja en Málaga y Sevilla y van a ir extendiéndose por otras provincias. Según informa UGT, en Valladolid tendrán lugar el próximo lunes, 23 de noviembre, así como el 1 de diciembre. Serán en la Plaza de Zorrilla entre las 18:00 y las 19:00 horas. El calendario de movilizaciones prevé también dos jornadas de huelga los días 26 de noviembre y 1 de diciembre.
Las protestas, explican las fuentes sindicales, se inicia después de que la empresa «no haya mostrado ninguna voluntad negociadora». Todas la organizaciones que representan a la plantilla rechazan la aplicación de medidas traumáticas, exigen voluntariedad en todos los casos, y consideran «un despropósito el planteamiento de la empresa, máxime cuando tras la fusión con Liberbank, Unicaja Banco ha obtenido un beneficio neto de 1.395 millones de euros hasta el pasado septiembre, 12 veces más que en el mismo periodo de 2020».
CSIF lamenta que hasta el momento la dirección de la entidad «no haya afrontado las negociaciones con respeto y responsabilidad hacia una plantilla profesional que lleva años trabajando y sacrificándose, incluso en épocas de crisis económica y pandemia». En sentido similar se posicionan UGT y CIC, mientras que CC OO, que no secunda las protestas en la calle, también cree que un posible acuerdo pasa por la retirada de las causas económicas y productivas, la voluntariedad como único criterio de adscripción a las medidas y la ampliación del colectivo incluido en las prejubilaciones voluntarias «en condiciones económicas incentivadoras como ha ocurrido en otras entidades del sector».
Tras su fusión con Liberbank, el nuevo Unicaja Banco anunció a los sindicatos un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 1.513 trabajadores, el 15% de la plantilla, y supondrá el cierre de 395 sucursales en toda España, un 28% de su red. En Castilla y León, Unicaja prevé cerrar 80 oficinas y eliminar 401 empleos. Quiere cerrar tres oficinas en Ávila, otras tantas en Burgos, 14 en León, 12 en Palencia, 10 en Salamanca, una en Segovia, 11 en Soria, 14 en Valladolid y 12 en Zamora, principalmente en el medio rural. Los cierres planteados conllevarían la salida de 13 empleados en Ávila, 24 en Burgos, 118 en León, 33 en Palencia, 57 en Salamanca, cuatro en Segovia, 20 en Soria, 97 en Valladolid y 35 en Zamora.
En la propuesta de salidas dentro del ERE presentada el martes por la entidad a los representantes de los trabajadores, Unicaja mejora los porcentajes de salario en sus indemnizaciones por tramos de edad, así como las compensaciones por movilidad geográfica, pero, aunque señala que primará el criterio de voluntariedad, mantiene las salidas forzosas por criterio de competencia si los excedentes no se cubren de manera voluntaria. La entidad deja fuera del proceso los trabajadores de entre 50 y 55 años, que sin embargo podrían verse afectados por la movilidad geográfica.
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