Sémper llama «irresponsable» a García-Gallardo por usar la Junta para sembrar «cizaña»

Borja Sémper, portavoz del comité de campaña de los populares, ha llamado «irresponsable» al vicepresidente de la Junta, cuestionando, en una entrevista en RNE, que sean los problemas de los ciudadanos lo que mueva el proceder de García-Gallardo en el Gobierno autonómico. «Lo que más necesita Castilla y León y España en este momento es estabilidad, sensatez y gobiernos, también vicepresidentes, que se dediquen a ocuparse de los problemas reales de la gente y no a cizañar o generar incendios», ha esgrimido el dirigente vasco recuperado por Feijóo para trabajar en el partido.

Sémper ha reiterado el argumento al que se abona cualquier dirigente del PP ante un micrófono de que la polémica generada por Vox beneficia al Gobierno de Pedro Sánchez. Para el portavoz popular hay «un vicepresidente irresponsable» que ha provocado «un requerimiento fantasma» de un Gobierno de la nación que ha aprovechado la oportunidad para «desviar la atención de los graves problemas que afronta». El principal, el desgaste que supone el enfado ciudadano ante el goteo de rebajas de penas y excarcelaciones de agresores sexuales por la mala redacción de la ley del 'solo sí es sí'. «Se retroalimentan», ha puntualizado Borja Sémper en referencia a Vox y el Gobierno central.

La dirección nacional del PP sitúa las posibles repercusiones de ese comportamiento 'irresponsable' de García-Gallardo en el despacho de Alfonso Fernández Mañueco, como máximo responsable de la Junta, por ser el quien tiene «competencias» para tomar decisiones. Es potestad del presidente del Gobierno autonómico cesar a los miembros de su Ejecutivo o adelantar elecciones. Mañueco lo hizo hace poco más de un año, rompiendo el gobierno con Cs y disolviendo las Cortes de Castilla y León. Si el PP quisiera aplicar la misma receta con Vox y hacer coincidir unas nuevas elecciones autonómicas con las municipales el último domingo de mayo, Mañueco debería convocarlas el lunes 3 de abril.

Borja Sémper ha insistido en que las medidas provida que anunció el jueves un vicepresidente de perfil «particular« (en referencia a que carece de área de gestión) «no existen» y que por eso le ha «corregido» Alfonso Fernández Mañueco. Un planteamiento, el de que no hubo acuerdo alguno el pasado jueves, en la reunión semanal del Consejo de Gobierno de la Junta, que desmienten de nuevo desde Vox.

Este miércoles Rocío Monasterio ha tomado el relevo del propio García-Gallardo, Ignacio Garriga o Iván Espinosa de los Monteros. La portavoz del partido en la Asamblea de Madrid, también en una entrevista radiofónica en EsRadio, ha insistido en que el protocolo se acordó el día 12 de enero. Lo demuestra, ha explicado Monasterio, el hecho de que junto a García-Gallardo estaba el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, del PP, que «no fue secuestrado» por el vicepresidente para coprotagonizar la comparecencia ante los medios de comunicación. El dirigente popular, veterano en lides políticas, confirmó en esa rueda de prensa que el asunto se había tratado.

El cruce de reproches entre dirigente nacionales de PP y Vox se contrapone al silencio que mantienen los directamente implicados a este lado de los túneles de Guadarrama. Alfonso Fernández Mañueco y Juan García-Gallardo han medido al milímetro sus apariciones públicas, limitando su agenda de actos públicos a convocatorias sin preguntas, especificando que son solo para fotógrafos y cámaras.