Borrar
Coronavirus Castilla y León: «Las expectativas juegan un papel menos dramático que en la crisis de 2008»

«Las expectativas juegan un papel menos dramático que en la crisis de 2008»

José Luis Rojo, catedrático de Economía Aplicada, lleva 30 años tratando de avanzar el comportamiento futuro de la actividad de Castilla y León

Antonio Corbillón

Valladolid

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Lunes, 20 de abril 2020, 07:07

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El catedrático de Economía de la Universidad de Valladolid José Luis Rojo lleva 30 años tratando de avanzar el comportamiento futuro de la actividad de Castilla y León con los informes del grupo Hispalink.

–¿Cómo afectará a lo global la contracción de las familias?

–Esa contracciones deben tener una necesaria repercusión en la economía regional. Debe tenerlo para el consumo de las Administraciones (un 21% del PIB), cuyo gasto tras la fase más dramática de la covid-19 se contendrá notablemente para responder a la caída de los ingresos públicos.

–¿Y cómo cambiarán las prioridades de esas familias?

–En el consumo de las familias (69% del PIB) provocará un cambio estructural en las estrategias de consumo. Si bien no parece previsible salvo, tal vez, un mayor gasto en sanidad (ahora es el 3,4%), y en los sectores relacionados con el comercio y el ocio 'on-line'. También son previsibles modificaciones en el corto plazo, que afectarán a los resultados de 2020. En el muy corto plazo, durante la fase álgida, una fuerte contracción en transporte, hostelería, ocio y vestido (suponen algo más del 30% del consumo) que mantendrán disminuciones respecto al pasado año, al menos hasta septiembre de 2020. Aunque son previsibles episodios de euforia transitorios y muy cortos en el tiempo.

–Los ERTE y despidos marcan la pauta.

–Se sumará la disminución de productos básicos para los hogares que no tienen garantizado el salario más allá de su actividad productiva y a los que subsisten desde la economía irregular. A partir del verano, el ritmo de consumo de las familias dependerá de las expectativas de ingresos futuros. Las familias españolas se encuentran mucho menos endeudadas que en la crisis de 2008-2013, por lo que las expectativas juegan un papel menos dramático que entonces.

–¿Los nuevos hábitos se quedarán o son coyunturales?

–Resulta difícil apreciar la dinámica de consumo a medio y largo plazo, y cómo esos cambios se pueden superponer a las grandes tendencias del cambio tecnológico. La posibilidad de cambios en el tamaño y la composición del consumo a medio y largo plazo derivados del coronavirus forma parte, hoy día, más de la adivinación que de la predicción económica.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios