Toro celebra la boda infantil a la antigua usanza

La localidad zamorana de Toro celebró ayer uno de los momentos más emblemáticos del Carnaval antes del Domingo Gordo, la tradicional boda infantil, en la que decenas de niños ataviados a la antigua usanza asistieron al enlace entre Cecilia Sánchez y Adrián Jiménez, de 9 años y compañeros de colegio.

En el salón de plenos del Ayuntamiento toresano esperaban los invitados y los familiares mientras que los novios, como manda la tradición, se hicieron esperar. Era día de celebración. Así lo anunciaba el ritmo de las canciones de la charanga y medio centenar de niños de Toro y de pueblos del alfoz que lucieron sus mejores galas. Así, trajes típicos locales de labradora, mantones de manila y faldas chinas desfilaron junto a capas negras y sombreros, como manda la tradición de un Carnaval del que se encuentran referencias ya en el año 1590 y que fue declarado de Interés Turístico Regional en 1995.

«Que empiece ya, que el público se va», coreaban los invitados al enlace mientras la novia se hacía esperar. «Estará comprando el ramo», apuntaban entre corrillos. Finalmente y tras la llegada de los novios y de los padrinos, el salón de plenos del Consistorio fue testigo del «sí quiero» entre Cecilia Sánchez y Adrián Jiménez, en un enlace muy especial ya que además de sellar una amistad para siempre, se celebraba el Día de San Valentín.

«¿Qué día es hoy?», preguntó la concejala de Festejos, Mely Pérez, a los asistentes entre las risas de los más pequeños que negaban estar enamorados. «Hoy se celebra el día de los enamorados pero también el día de la amistad y de los amigos», explicó la concejala preguntando a los novios si estaban convencidos de su decisión.

Y claro que lo estaban. El novio, Adrián Jiménez, prometió defender a Cecilia Sánchez siempre que alguien la increpe, compartir con ella juegos y mandarle todos los días mensajes de WhastsApp; mientras que Cecilia se comprometió a defender siempre al joven esposo y a compartir chucherías y juegos, además de contestar a los mensajes que éste le envíe.

Un beso en la mejilla selló la amistad de los niños de 9 años frente a los padrinos, David Calvo y Bárbara Sánchez, protagonistas el año pasado de la boda tradicional y que en esta ocasión aparecían acompañados ya de un muñeco a modo de hijo.

Se trata de un acto que se celebra desde hace más de 25 años en la localidad zamorana a imagen y semejanza de la tradicional boda de adultos que tendrá lugar hoy, en la que los protagonistas serán José Hernández Álvarez y Sebita de la Calle Morillo.

Para la ocasión, el novio lució un traje típico y sombrero y capa negros, mientras que la novia y la madrina vistieron reproducciones de los fondos del Museo Etnográfico de Toro y su alfoz, que está previsto que se ubique en el edificio de la plaza del Concejo.

Tras el «sí quiero», el esperado beso en la mejilla y el «viva los novios», los amigos de estos interpretaron la canción tradicional Viva los novios y los padrinos y salieron en comitiva del Ayuntamiento para desfilar por la Plaza Mayor y las calles del centro de Toro, y asistir al convite.