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La violencia de hijos hacia padres continúa en ascenso

Los jueces piden a la Junta más plazas en centros de convivencia para atender un problema creciente

Pablo Garcinuño

Jueves, 25 de septiembre 2014, 14:00

La violencia intrafamiliar de hijos a padres continúa en ascenso en todo el territorio nacional y en Castilla y León ya supone entre el 8 y el 10% de todas las medidas judiciales que se imponen a adolescentes. No es un fenómeno reciente, pero lleva entre 10 y 15 años con un incremento constante, no muy grande, pero sí continuado, tal y como advirtió ayer el director técnico de Atención a la Infancia de la Junta de Castilla y León, Pablo Rodríguez Hoyos.Hubo una explosión de casos en el año 2007 y desde entonces las cifras se mantienen en sentido ascendente, afirmó la magistrada del Juzgado de Menores de Burgos, Blanca Subiñas Castro, quien participó en Ávila, junto a Rodríguez Hoyos, en una mesa redonda incluida dentro del congreso Violencia intrafamiliar, mujer y menores. Derechos de la infancia.La jueza cifró en unos 5.000 los expedientes que se producen al año en España en este sentido, lo que supone un tercio del trabajo total de los juzgados de menores. Unos datos que pueden esconder otros muchos casos, ya que, como señala Subiñas, denunciar a un hijo siempre es el último recurso porque conlleva, por parte del padre, el reconocimiento de un fracaso en el proceso educativo: Y eso cuesta mucho reconocerlo, añadió.Centros copadosEn los casos más graves, los jueces de Castilla y León suelen separar al adolescente de su ambiente familiar. Se trata de trasladar al menor a otro centro de convivencia donde, de alguna manera, le enseñan a comportarse, a no utilizar técnicas de violencia y a recuperar la jerarquía perdida en el domicilio; porque los padres no son los colegas de sus hijos, son los que tienen que poner las normas de comportamiento, afirma la magistrada de Burgos.La verdad es que en Castilla y León hemos tenido muy buen resultado con centros que se han dedicado, desde la reforma de menores, a tratar este tipo de asuntos; y ahora podemos decir que nos hemos muerto de éxito porque son centros que están copados continuó. Actualmente lo que demandamos es el aumento de plazas ante el aumento de la problemática.EducaciónEs la Junta de Castilla y León la que ejecuta las medidas que se imponen a los menores adolescentes infractores. Además, tal y como señaló el director técnico de Atención a la Infancia, se llevan a cabo programas preventivos cuando se aprecian factores de riesgo en familias que viven en situaciones marginales o de desestructuración. En su opinión, es importante volver a insistir en la educación en los adolescentes y las familias frente a estos problemas. Idea en la que también insistió Blanca Subiñas: La base del problema es la educación y el sexismo en el que educamos a nuestros hijos.Pablo Rodríguez Hoyos también aseguró que se está percibiendo que cada vez hay más violencia entre adolescentes, es decir, que el chico ejerce violencia sobre la chica y la chica, además, es más permisiva. Incluso muchas jóvenes entienden las agresiones como un amor más posesivo, fuerte y sincero. Las causas no están nada claras, pero es cierto que es un compendio de muchas situaciones: el individuo, la educación, la sociedad, el ambiente en el que se crece, la pérdida de valores.

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