El 90% de la venta de pirotecnia del año en Palencia corresponde a estos días

Son otras estrellas de la Navidad. Porque estas fechas, además de festivas, son ruidosas. Las calles se llenan, suenan los villancicos y las panderetas, el tráfico es intenso y entre todo el bullicio se escucha también el estruendo de los petardos, cohetes o las muy demandadas baterías de fuegos artificiales. Palencia cuenta con nueve establecimientos autorizados para la venta de artículos pirotécnicos cuatro en la capital, dos en Saldaña, uno en Villaumbrales, otro en Villanueva y otro en Cervera de Pisuerga, que constatan en estos días las colas de clientes. Y es que estas empresas reconocen que casi el 90% de las ventas de todo el año corresponden a la Navidad. «Nuestra demanda se mantiene bastante fiel, nosotros llevamos diez años trabajando y la mayoría de los clientes repiten año tras año y vienen además muchos nuevos, lo que ocurre es que el que antes se gastaba 100, ahora se gasta 80», explica Miguel Ángel Martino, de Pirofiesta Palencia, ubicada en el polígono de Pan y Guindas.

La venta de estos artículos está perfectamente regulada según un reglamento de mayo de 2010 del Ministerio de la Presidencia, en el que se establecen tres categorías. Los productos clasificados en la clase 1 como bombetas o bolas de humo, de muy escasa carga solamente pueden ser vendidos a mayores de 12 años; los de la clase 2 petardos de mecha de poca intensidad a mayores de 16; y los de la categoría 3 voladores, petardos de trueno, cohetes o baterías a mayores de 18 años. «Tenemos inspecciones periódicas de la Guardia Civil, que controla la venta y el almacenamiento de productos, ya que no podemos tener más de 15 kilos de masa explosiva en el almacén», añade Martino.

Por su parte, José Antonio Fernández, encargado de tienda de Pirotecnia Palencia ubicada en la avenida de Castilla, constata que la vigilancia sobre estos productos es elevada, y que además vienen preparados de forma segura, si bien hay que seguir unas recomendaciones de uso. «Antes se trataba de una actividad casi clandestina, pero ahora está muy regulada y todos los productos vienen marcados con la directriz de la CE», destaca.

Los artículos con más éxito son los clásicos petardos 'de peseta', que se venden por cajas de 100 unidades a 1 euro o incluso 50 céntimos, muy demandados por los adolescentes porque son los que más ruido hacen, y todos clasificados en la categoría 2, por lo que no se venden a menores de 16 años. Por su parte, los más mayores optan más por los cohetes, fuentes o baterías, que lucen a ras de suelo. Las baterías se venden a precios que oscilan entre los 10 y los 100 euros, con una gran variedad de tamaños y modelos, así como de sensaciones sonoras.

Precisamente esas sensaciones son las que repudian los detractores de los artículos pirotécnicos, cuyo uso está regulado por el reglamento del Gobierno. Por su parte, el Ayuntamiento solo se remite a un bando de 2005, que sí prohibe explotarlos en plazas, calles y lugares de uso público, con excepción de acontecimientos o fiestas, como son estas navidades.