El presupuesto de la Diputación de León se reduce el 19% aunque ascenderá a 131 millones en 2012

131.542.160,03 euros. Es el presupuesto que el equipo de gobierno de la Diputación de León llevará el viernes, a pleno para debatir con la oposición. La cantidad es un 18,84 por ciento menor que la de 2011 debido, entre otras cuestiones, a la disminución de las aportaciones externas, como las del Estado, del que también perjudica a la administración provincial el desfase en la evolución del crecimiento, dado que la Administración Central lo estimó en 1,3 y tan solo ha llegado al 0,8, y las devoluciones por ingresos a cuenta en 2008 y 2009 que ascienden a más de 33 millones de euros. Esta cifra se aleja de los 173 millones de euros presupuestados en 2009.

El portavoz de la Diputación, Jaime González, explicó que el equipo de gobierno pretende buscar «la solidaridad» con estos presupuestos, a la par que «ser prudentes» por lo que están elaborados desde «el peor escenario posible», por lo que esperan que se produzcan modificaciones a lo largo del año que permitan mejorar la cuenta de ingresos. También las calificó Jaime González de «comprometidos con la inversión» y con el desarrollo de las labores propias de la Diputación.

El esfuerzo inversor de la administración provincial se sitúa en un 28 por ciento y pasa de 57 a 37 millones de euros, entre otras razones, por la finalización de grandes actuaciones, como la línea eléctrica a San Isidro o la creación de los Centros Innovadores de Acción Social.

La institución provincial verá reducida su plantilla en 23 personas, correspondientes a plazas vacantes, de cobertura temporal o jubilación de alguna plaza, lo que supone un ahorro de 784.000 euros. También desciende el gasto en suministros, más de 900.000 euros, gracias a la centralización para la búsqueda de mejores precios y la supresión de gastos no productivos.

Aunque austero, es el ejercicio en el que la administración provincial destinará un mayor tanto por ciento a los gastos de servicios sociales. El presupuesto será «más social que nunca», ya que destina un 30 por ciento del total a este ámbito, frente al 25 por ciento de 2011. Se incrementan partidas como la de teleasistencia o la de apoyo a las familias.

Pese a la disminución en las cantidades, la Diputación espera reducir la deuda en 2,3 millones de euros para finales de 2012, de 111,5 millones de euros a 109,2. Además en 2012 la institución no pedirá dinero a los bancos, por lo que no crecerá el endeudamiento.