Una exposición reúne en León 50 inventos y 18 reproducciones de pinturas de Da Vinci

Apenas realizó una veintena de obras originales y, sin embargo, es uno de los artistas más influyentes de toda la historia. El legado de Leonardo Da Vinci (1452-1519) lo recoge una muestra única que llega por primera vez a España y que hasta el próximo 13 de abril se podrá ver en el Edificio Botines de Gaudí en León. Medio centenar de modelos de los inventos más innovadores de Leonardo Da Vinci y 18 reproducciones de sus obras pictóricas como 'La última cena' -a tamaño real-, integran una exposición que aterriza en León después de haber viajado por Europa y Estados Unidos donde ha recibido más de 300.000 visitas. Una muestra que el presidente de Caja España, Santos Llamas, calificó de «excepcional» y que revela el ingenio y la brillantez de un hombre adelantado a su tiempo.

Se trata de una exposición sobre todo de inventos, ya que Leonardo fue mucho más que un pintor aunque su nombre ha quedado universalmente asociado a pinturas como ''La Mona Lisa' o 'La Última Cena'. «El talento de Leonardo se extendió más allá de los pinceles, en campos como la ciencia o la ingeniería y fue muy prolífico como inventor», afirmó Santos Llamas.

El hombre volador

Inventos como el paracaídas, la maquina para caminar sobre el agua, el hombre volador, el cambio de velocidades o las cadenas para bicicletas son algunas de las maquetas que se muestran en esta exposición y que han sido fabricadas por cualificados artesanos en Florencia siguiendo, cuidadosamente, cada detalle de los diseños originales del artista italiano. Los inventos son, además, interactivos ya que los visitantes podrán «pulsar, apretar o mover las manivelas» y comprobar su funcionamiento, según expuso Llamas.

Leonardo es, para el director del Museo provincial de León, Luis Grau -experto en la obra de Da Vinci (1452-1519) y que ejerció de guía en la inauguración, ya que el comisario de la misma, Christoph Rahofer, no pudo trasladarse a León-, «el sabio total», es el científico, el pintor, el músico, el escritor, el ingeniero, el matemático, el biólogo, el médico, el filósofo, el botánico, el cartógrafo, el escenógrafo. «Leonardo es todo esto y también era vegetariano y homosexual en una época en la que estas dos cosas no eran bien vistas», añadió Grau.

Lo «impresionante de Leonardo» para Grau es que fue «bueno en todo y tocó todos los palos», aunque haya quien piensa que no fue el mejor pintor de la historia del arte, ni el mejor ingeniero, ni el mejor físico, ni el mejor matemático. Sin embargo, hay algo claro, Da Vinci fue el primer hombre moderno y «quizá el último que aspiró a tener un conocimiento total de todas las ciencias».

El afán de Da Vinci fue que el mundo fuera un poco mejor. Algo que queda reflejado en esta exposición en la que se observa que el principal objetivo de los inventos del artista italiano era conseguir ahorrar esfuerzos al ser humano en las tareas físicas. Y es que una de las características de Leonardo fue su empirismo con una obra ligada a la práctica. La segunda característica que le define, según Grau, es su inquietud e inconstancia que le llevaron a dejar inacabadas muchas de sus obras. De hecho, la mayor parte de las máquinas que se exponen en esta muestra proceden de bocetos que nunca se llevaron a la práctica.

intrigas

En la vida de este artista total del Renacimiento italiano hay hechos que hacen, incluso, más apasionante su existencia. Nació como hijo ilegítimo de un notario y una campesina en abril de 1452 en Florencia y falleció en 1519 a los 67 años de edad. Sus obras están frecuentemente marcadas con su huella dactilar como firma y, además, era zurdo, lo que se consideraba como un signo de impureza, aunque usó la mano izquierda a lo largo de toda su vida.

Cuando dibujaba los planos de sus inventos, dejaba fuera, a propósito, un elemento esencial para que no se pudieran copiar sus ideas. Para realizar sus pinturas y estudios científicos hizo autopsias para conocer mejor la anatomía humana.