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USO Y NORMA DEL CASTELLANO

Adjetivos ¿superfluos?

MARÍA ÁNGELES SASTRE

Sábado, 16 de febrero 2008, 01:12

EL adjetivo calificativo acompaña al sustantivo (o nombre) para expresar alguna cualidad de la persona o cosa nombrada. Un tipo especial de adjetivo calificativo es el que se conoce como epíteto. El epíteto dice de la cosa expresada por el nombre una cualidad natural en ella o que se considera natural, como por ejemplo transparente en el sintagma las transparentes gasas. Si buscamos en el diccionario la palabra gasa, todas las acepciones hacen referencia a un tejido fino, delgado, ligero, de aspecto vaporoso, poco tupido, ralo, etcétera, que favorece su transparencia. Decir entonces que una gasa es transparente es decir algo obvio, pues el adjetivo subraya (o recalca) una cualidad característica del nombre al que acompaña. Son también epítetos los adjetivos verde y blanca en las expresiones la verde hierba y la blanca nieve, ejemplos que aparecían siempre en los libros de texto.

Una de las características de los epítetos es que ninguno lo es por sí mismo, sino dentro de un sintagma o de un grupo nominal, lo que quiere decir que no disponemos de un catálogo o repertorio de epítetos. Además, suelen aparecer antepuestos (aunque no necesariamente) al nombre al que acompañan. En general los epítetos, puesto que son adjetivos que no son necesarios, se emplean para producir un determinado efecto estético, de ahí su frecuencia en los textos literarios. Pero mi intención es llamar la atención sobre unos cuantos adjetivos que casi constantemente acompañan a algunos sustantivos y que se cuelan sin pedir permiso en nuestras conversaciones y escritos. Me refiero a los que se conocen como epítetos-tópico, que contribuyen al establecimiento de clichés tan manidos como fiel reflejo o auténtica catástrofe. Juzguen ustedes si no leen escuchan con demasiada frecuencia 'asociaciones' como las que aparecen en los ejemplos siguientes: Los personajes de una obra son un fiel reflejo de la vida cotidiana; El suceso pudo haber provocado una auténtica catástrofe; Los dos ministerios trabajan en estrecha colaboración; Tenemos plena confianza en que todo saldrá bien; La asociación contará con la participación activa de psiquiatras, abogados y jueces; El texto define la situación con claridad meridiana; Hay un deseo ferviente de que todo termine pronto; Se le dará cumplida cuenta del resultado de la operación; A medida que se vayan produciendo los cambios, tendrán ustedes información puntual de ellos; Es un tema de palpitante actualidad.

Los expertos consideran que, en general, el uso constante y continuado de estos epítetos empobrece la expresión, por lo que se recomienda evitarlos salvo en aquellos casos excepcionales en que con ellos se pretenda manifestar un énfasis especial.Más normas y recomendaciones para el uso correcto del castellano. Envíe sus consultas a: uyn@nortecastilla.es

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