Cae una red que sustrajo 43.000 euros en cable de cobre de la red de Telefónica
Los cinco integrantes del grupo criminal, que se desplazaban desde Santander, Navarra y Vizcaya, actuaban especialmente en las inmediaciones de la autovía A-62
La Guardia Civil de Valladolid ha detenido a cinco hombres, con edades comprendidas entre los 22 y los 33 años, e investiga a una sexta persona, como presuntos autores de un delito de pertenencia a grupo criminal, un delito de robo con fuerza, seis delitos de hurto agravado y un delito de daños, por la sustracción de 4.530 metros de cable de cobre en distintos puntos de la red de telefonía de la provincia de Valladolid. El valor de lo sustraído, equivalente a 5.270 kilos de este material, supera los 43.000 euros.
Las detenciones, que se han llevado a cabo en el marco de la denominada Operación 'AGUILARO', son el resultado de una investigación que se inició a principios de este año, tras varias denuncias de Telefónica. La operadora detectó, entre abril y mayo, la sustracción de cableado aéreo de telecomunicaciones hasta en cinco ocasiones, con especial incidencia en las inmediaciones de la autovía A-62.
Las sustracciones se producían de madrugada, en zonas de difícil acceso y con abundante vegetación, lo que dificultaba la detección de los autores. Por lo que, ante la reiteración de los robos y el modus operandi empleado, los agentes sospecharon que se trataba de un grupo criminal organizado, con experiencia en este tipo de delitos.
Por ello la Guardia Civil estableció dispositivos de vigilancia en puntos estratégicos, especialmente en el término municipal de Cabezón de Pisuerga. Y en la madrugada del 23 de abril, tras un salto de alarma por corte de cable, los agentes detectaron un vehículo sospechoso realizando labores de vigilancia. Al inspeccionar la zona, se localizaron 923 kg de cobre apilado y preparado para su carga, así como escaleras telescópicas y herramientas de corte ocultas entre la maleza.
El cable intervenido en aquella ocasión, correspondiente a unos 800 metros de línea telefónica, fue valorado en 10.250 euros. En otro de los hechos investigados, los autores llegaron a cortar dos postes de madera para acceder al cableado, provocando daños en una finca privada.
Pese a que los vehículos estaban registrados a nombre de terceras personas, dificultando esta labor, tras las primeras pesquisas se logró vincularlos con un grupo de individuos de nacionalidad extranjera, que residían en las provincias de Santander, Navarra y Vizcaya.
Reparto de funciones
El grupo se desplazaba desde sus lugares de residencia hasta la provincia de Valladolid en vehículos de gran capacidad. Actuaban de madrugada, con un claro reparto de funciones: unos accedían al cableado mediante escaleras telescópicas y realizaban los cortes, mientras otros vigilaban los alrededores para detectar la presencia policial.
El cable era segmentado en tramos pequeños, desprovisto de su funda plástica y cargado en las furgonetas. Posteriormente, lo trasladaban a centros de reciclaje para su venta inmediata, obteniendo así un beneficio económico rápido y difícil de rastrear.
Las zonas elegidas para actuar eran preferentemente áreas rurales o de monte bajo, donde las líneas de telecomunicaciones discurren por terrenos poco transitados, lo que facilitaba la ocultación durante la ejecución de los robos.
Investigación abierta
Hasta el momento se han esclarecido seis hechos delictivos, con un total de 4.530 metros de cable sustraído, equivalente a 5.270 kg de cobre. Los daños ocasionados superan los 43.000 euros, sin contar los perjuicios adicionales a las infraestructuras de telecomunicaciones.
Los cinco detenidos, con edades comprendidas entre los 22 y 33 años, cuentan con antecedentes por delitos similares. Todos ellos han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Valladolid. La investigación continúa abierta para esclarecer otros posibles hechos delictivos relacionados con la sustracción de cobre en la provincia.
