Valladolid cierra el paso a las grandes superficies comerciales

El Ayuntamiento de Valladolid no autorizará, al menos en los próximos cuatro años, el asentamiento de nuevas grandes superficies comerciales. Así lo ha señalado María Sánchez, la concejala responsable del área de consumo. La edil ha sido taxativa al comentar que el actual equipo de gobierno municipal apuesta «por el comercio de próximidad y no vemos oportuno que vengan más superficies, porque no solamente son los puestos de trabajo los que se destruyen, sino que la vida en el centro desaparece. Valladolid ha superado con creces el número de estas superficies por habitante. Hay metros de sobra ocupados por las grandes superficies como para no seguir insistiendo en ese modelo».

Este cambio en la política municipal en este terreno va a llevar aparejado que se potencien los mercados municipales y el liderazgo del consistorio en lo que se refiere a incorporar nuevos proyectos. «Por ejemplo, en el de Delicias pretendemos ocupar un espacio de 90 metros cuadrados para destinarlo a dinamizar el mercado, o para formación de cocineros. Para ello, convocaremos un concurso de ideas entre estudiantes de Arquitectura. El concurso se hará a principios de año. Es muy importante que las nuevas generaciones se incorporen a los mercados municipales», enfatiza la concejala.

Otro de los asuntos que quiere abordar Sánchez en el menor tiempo posible es el de los bares musicales y los conflictos que se provocan entre este tipo de negocios y los vecinos. La posición de la responsable de la Concejalía es la de «conciliar ambas posturas. El ocio y las muestras culturales son necesarias en la calle, pero tienen que convivir con el derecho al descanso vecinal. Tanto hosteleros como los grupos musicales tienen claro que también ellos son vecinos. Vamos a publicar una normativa para hacer conciertos en la calle de tal modo que se fije un límite, que hemos hemos establecido por ahora hasta las 23:30 horas. Es una hora razonable para una actuación de calle. Estamos estudiando con los grupos locales autorizar lo que se conoce como sesiones de vermú musicales, que hay en otras capitales», dice.