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Los jóvenes acaparan el 55,5% de las autorizaciones para plantar viñedos

Los jóvenes acaparan el 55,5% de las autorizaciones para plantar viñedos

En total, el Magrama ha concedido 955,42 hectáreas a Castilla y León de la reserva nacional

Silvia g. rojo

Domingo, 14 de agosto 2016, 16:36

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La apuesta es por los jóvenes nuevos viticultores y ellos han sido los principales destinatarios del reparto de las autorizaciones concedidas por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) para nuevas plantaciones de viñedo. La noticia es reciente y es en estos días cuando todos los solicitantes están recibiendo la carta correspondiente con la resolución cuya notificación corresponde a la Junta de Castilla y León.

En el caso concreto de la comunidad, de las 955,42 hectáreas que se han otorgado, 529,46 corresponden al denominado grupo 1, es decir, al apartado en el que se ubican esos jóvenes. Las restantes corresponden a viticultores que han tenido mayor puntuación conforme a lo establecido en la normativa nacional en la que se recoge lo que se considera como «buen comportamiento» y que representan aquellos que no tienen el viñedo abandonado o ilegal.

Pero para entender un poco mejor el motivo por el que ahora se conceden estos permisos, es preciso matizar algunas cuestiones como por ejemplo que el pasado uno de enero entró en vigor el nuevo régimen de autorizaciones de plantaciones de viñedo que sustituye al antiguo sistema de derechos y que según el Ministerio «permite continuar con un crecimiento controlado del potencial de producción».

En el conjunto nacional se han concedido 4.173 hectáreas y Castilla y León ha sido la segunda comunidad más beneficiada por detrás de Castilla la Mancha.

Dentro de esta relación nacional, se habían solicitado 11.858 hectáreas y de las finalmente concedidas, 1.224 hectáreas corresponden a solicitudes de jóvenes nuevos viticultores mientras que las 2.949 restantes corresponden a otros grupos.

Dentro del periodo que se habilitó para optar a estas autorizaciones, en la Comunidad se formalizaron 435 solicitudes que correspondían a 427 solicitantes. De esas solicitudes, 387 eran admisibles y otros 385 solicitantes eran los admitidos. Finalmente, el Ministerio ha dicho sí a 385 solicitudes y a 380 solicitantes.

La superficie que se pidió y lo que finalmente se ha concedido también difiere y mientras que desde la región se solicitaron 1.970 hectáreas, se consideraron admisibles 1.721 aunque luego se hayan autorizado 955,42 hectáreas.

Todos esos beneficiarios tendrán un plazo máximo de tres años desde el momento de la concesión para realizar la plantación y esas autorizaciones no serán transferibles. En ese sentido, ese mercado de compra-venta que había existido con el régimen de derechos ha desaparecido, al menos en teoría. Uno de esos nuevos jóvenes viticultores es Ventura González, agricultor de Madrigal de las Altas Torres y cuyo término municipal entra dentro da denominación de origen Rueda.

González cultiva cereales, productos hortícolas y maíz pero se muestra convencido de que «no quiero tener todos los huevos en la misma cesta». Ve perfectamente compatible diversificar el trabajo a lo largo del año y ya se ha puesto a hacer cuentas de lo que le va a suponer plantar esas 18,25 hectáreas que le han concedido, el 100% de lo que había demandado.

Gastos

«El gasto para plantarlo es importante y en secano estamos hablando de entre unos 10.000 o 12.000 euros y en regadío entre unos 12.000 o 14.000 euros», comenta. Es verdad que en un primer momento se puede optar por el secano y dejar la superficie preparada para en un futuro, convertirlo a regadío.

La otra cuenta, la de la rentabilidad futura también la ha efectuado y «dándolo todo a hacer», cada hectárea tiene unos gastos de unos 2.500 euros. La estimación no termina aquí y sin poner como referencia los topes máximos de producción ni de precios, «si coges unos 7.000 kilogramos de uva por hectárea a 0,60 euros, tienes unos ingresos de 4.200 euros por hectárea», manifiesta Ventura González.

En el caso de Madrigal de las Altas Torres es curioso que el propio Ayuntamiento es viticultor y tiene sus plantaciones de viñedo.

En otro punto de la región está Alberto Martín, un joven de la localidad zamorana de Villaescusa. A este agricultor también le han otorgado el 100% de lo solicitado al Ministerio, un total de nueve hectáreas y todo por estar en ese apartado de menores de 40 años.

Alberto Martín casi todavía está asimilando la noticia pues no en vano, la notificación ha sido reciente si se tiene en cuenta que las comunidades debían darla a conocer antes del uno de agosto por lo que todavía no asegura en qué momento comenzará a realizar la plantación y apela a ese plazo de tres años.

El término municipal de Villaescusa está dentro de la denominación de origen Toro, así que si algo está claro es que sus uvas serán tintas. La decisión de solicitar autorizaciones para plantar viñedo vino motivada porque «me parece algo rentable» aunque es consciente de que «la inversión es importante, según me han dicho, unos 10.000 euros por hectárea», añade Alberto Martín.

A la hora de presentar sus solicitudes, en cierta medida todos ellos debían llevar definido el proyecto y especificar las parcelas, polígonos y superficies en las que querían efectuar la plantación. Ahora con esa autorización en la mano, el siguiente movimiento será trazar el paso para todos estos beneficiarios, realizar la plantación y elegir el mejor momento, no solo climatológico, sino también económico.

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