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PATRIMONIO

Recuperado un relieve del siglo XVI robado en 1991 en Becerril

El director de la Policía, Ignacio Cosidó, entrega al Obispado la obra, que fue localizada en marzo en una sala de subastas de Bilbao

R. S. R.

Sábado, 6 de abril 2013, 20:56

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El relieve de Santa Ana, la Virgen y el Niño, del siglo XVI, de autor anónimo pero atribuida a los discípulos del insigne Juan de Juni, fue robada en 1991 de la iglesia de Santa María de Becerril de Campos, durante las obras para la conversión del templo en museo. Los ladrones, tras excavar en un vano de altar, abrieron un boquete del tamaño de una persona por donde sacaron la pieza, que había sido llevada a esa iglesia después de permanecer en la ermita de los Nazarenos hasta que esta se hundió. A partir de ahí, la obra también se hundió, pero en el tiempo, hasta que el 8 de marzo se detectó en una sala de subastas de Bilbao, interviniendo la Policía a pesar de que su poseedor era «de buena fe» al tratarse de un bien de interés cultural de la Iglesia que, en virtud de la Ley de Protección de Patrimonio, tiene prohibida su transacción salvo que esta se lleve a cabo con el Estado, instituciones de derecho público o eclesiásticas.

Esta mañana, el director de la Policía, el palentino Ignacio Cosidó, a quien acompañaban el jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta, Julio Prieto, y el jefe de la Brigada de Patrimonio Histórico, Antonio Tenorio, ha hecho entrega de este relieve al Obispado de Palencia a través del delegado diocesano de Patrimonio, José Luis Calvo, en un acto que ha tenido lugar en la Iglesia Museo de Santa María de Becerril, de donde fue sustraída.

«Para mí, hoy supone una doble satisfacción esta entrega. En primer lugar, como palentino, porque la provincia de Palencia es una de las grandes potencias culturales de este país y tiene uno de los mayores patrimonios histórico-artísticos de toda España. En segundo lugar, como director general de la Policía, siento enorme orgullo por los miembros de la Brigada de Patrimonio Histórico, una de las mejores del mundo. Este éxito no ha sido obra exclusiva del buen trabajo de la Policía, también ha habido una gran colaboración de la Diócesis de Palencia aportando datos y documentos, y también de la Diputación, porque el Servicio de Cultura también ha aportado datos. Ha sido un éxito colectivo», ha señalado Cosidó, que ha incidido en que «este acto sirve para reiterar el compromiso del Cuerpo Nacional de Policía con el patrimonio histórico, es mandato expreso del ministro del Interior, que en su primera comparecencia en el Congreso ordenó la investigación del patrimonio histórico como una de las prioridades de la Policía y se está cumpliendo con ese mandato».

«Es una brigada que tratamos de potenciar a través de dos vías: por un lado la cooperación internacional, a través de Interpol se mejoran las herramientas para la colaboración con otras policías para recuperar obras de arte, y en segundo lugar, a través de los medios tecnológicos, desarrollando nuestras bases de datos para que todas las obras estén perfectamente catalogadas», ha hecho hincapié Cosidó.

El jefe de la Brigada de Patrimonio Histórico, Antonio Tenorio, ha recalcado que «las obras se detectan una vez que salen a la venta, que llegan a la sala de subastas, en tanto en cuanto no se mueven las obras es muy difícil localizarlas, porque no hay un hilo conductor». «Esta talla se detectó el 8 de marzo en una sala de subastas de Bilbao, salía a subasta los días 13 y 14 de marzo y el día 12 se formuló una denuncia y se intervino antes de la subasta, pero está acreditado que no es imputable penalmente ninguno de los poseedores que han sido identificados», ha agregado Tenorio, que ha comentado que el relieve «no ha salido de España».

Finalmente, José Luis Calvo, ha dado las gracias a la Policía Nacional por la recuperación de esta obra y por la restitución que se hizo hace dos años de otra gran obra de la Diócesis, San Juan de Llanto sobre Cristo Muerto de Balmaseda, robada de la iglesia de Villamediana.

La anécdota de la mañana la ha protagonizado el párroco Antonino Arenillas, ya jubilado, que ha sorprendido a todos al señalar que junto al relieve de Santa Ana, la Virgen y el Niño, recuperado por la Policía Nacional, se sustrajo el día del robo en la iglesia de Santa María otro relieve que estaba en el altar de San Antón y cuyo espacio permanece vacío. «Yo no tenía constancia del robo de esa talla, pero tomo nota», ha comentado el jefe de la Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional, Antonio Tenorio.

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