Nuclenor ratifica el cierre de Garoña porque tendría que pagar 153 millones

El Consejo de Administración de Nuclenor ratificó la decisión de cese de la actividad de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) para no tener que pagar 153 millones por el nuevo impuesto nuclear. Esta decisión fue adoptada este viernes por la empresa al conocer la redacción final de la ley de medidas fiscales para la sostenibilidad energética, que confirma la aplicación retroactiva del tributo, lo que permite a la sociedad acogerse a una de las causas de disolución prevista en la legislación.

El texto, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), confirma el carácter retroactivo del nuevo impuesto nuclear, lo que obligaría a un pago de impuestos de 153 millones de euros a Nuclenor. Sin embargo, la empresa explicó que tenía unos fondos propios a 30 de septiembre de 147 millones de euros y un resultado a dicha fecha de 9,6 millones de euros.

Por su parte, el consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, aseguró que la Junta ya está «apoyando la actividad económica» en la zona de influencia de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) y que va a seguir haciéndolo durante el proceso de desmantelamiento de la misma. Si bien, descartó que se apruebe un nuevo plan de reindustrialización para la comarca porque ya existen «los instrumentos para hacerlo», una idea que ya ha trasladado al Gobierno central.