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Valladolid
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Lunes, 20 de enero 2020, 22:38
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A punto de cumplir ocho años, el Captur goza de un estado de salud envidiable. Se han multiplicado los competidores de su segmento y, aun así, se mantiene en la cima de su popularidad. De hecho, en 2019 salieron de fábrica más unidades que en el año anterior y, tras unos meses con producción simultánea del modelo original y el nuevo, desde diciembre Renault ya solo monta la versión renovada, que antes del verano contará con una alternativa híbrida enchufable.
Los 237.000 Captur fabricados en 2019 suponen casi dos mil más (0,8%) que un año antes y han contribuido a alcanzar la cifra total 1,5 millones de unidades que han salido de Valladolid con destino a 70 países de los cinco continentes desde el arranque de producción en 2013.
El nuevo Captur se monta en una plataforma diferente a la del anterior, compartida ésta con el Clio y el Nissan Juke (CMF-B), que hace posible dotar al renovado modelo de una oferta de equipamientos y ayudas a la conducción que, literalmente, son el no va más en la actualidad; algunas en primicia en esta categoría de vehículos. Dicha plataforma permite la electrificación de los vehículos y la introducción de la motorización híbrida E-TECH Plug-in (enchufable), que llegará al mercado en cuestión de meses. Renault prevé producir en 2022 el 80% de sus vehículos en plataformas comunes de la familia CMF (Common Module Family). La factoría vallisoletana ha estado en obras durante tres años para adaptarse a ella, con una ampliación del área de chapa de más de 18.000 m2 y la introducción de 750 robots.
La era del nuevo Captur arrancó el 17 de septiembre del año pasado y en la actualidad se fabrica ya con una cadencia de 1.125 unidades al día. En concreto, de las instalaciones de la carretera de Madrid han salido ya 37.000 de la nueva edición, reconocible a simple vista por su frontal y trasero renovados y los once centímetros que ha crecido de largo. Su producción da trabajo a dos turnos y medio y Renault espera a conocer la acogida del mercado antes de decidir si aumenta el ritmo de fabricación y convierte el medio turno de noche , ahora con 450 personas, en un turno completo con 800.
El buque insignia de la marca del rombo en el segmento SUV urbano es ya el modelo más exportado de la historia de Renault España, con el 92% de la producción. Además, su éxito de ventas redunda en la buena marcha de la industria auxiliar y los fabricantes de componentes:un tercio de los proveedores son españoles y, lo que es más importante, proporcionan el 60% de las piezas.
El más vendido entre 2013 y 2019, con más de 110.000 unidades en el país y más de 7.000 unidades por encima del segundo clasificado, el Captur ha contribuido a aupar a España como el quinto mercado en importancia para Renault dentro de los 70 países donde está presente.
Además, el modelo 'made in Valladolid' atesora una particularidad muy valorada por el fabricante francés: hasta el 70%de sus ventas se realizan a clientes para quienes el Captur es su primer coche Renault. Es todo «un conquistador», resumió una fuente de la empresa. Uno de los factores de su capacidad de seducción, la opción bitono, ha resultado todo un hallazgo para la marca, que preparó las instalaciones de montaje para producir un 65% de unidades de dos colores y tuvo que aumentar al 80% debido a la demanda.
Por otro lado, la factoría de Motores produjo 1.335.000 unidades en 2019, el 7% menos, afectada por la desaceleración y la transición ecológica. Además, la planta ZE donde se montaba el Twizy monta ya las baterías eléctricas que equiparán tanto el Captur como, a continuación, el Mégane.
Un dato ilustra de forma elocuente sobre la velocidad de vértigo a la que avanza el sector del automóvil:el nuevo Captur tiene una longitud de 4,23 metros, apenas dos centímetros más de lo que medía el Scenic, un monovolumen del segmento C, de hace diez años. Además, subirse al último lanzamiento de Renault supone entrar en un paraíso tecnológico que ha sido diseñado pensando tanto en la seguridad como en la comodidad del conductor y los pasajeros. Por un lado, el coche es capaz de mantener la distancia de seguridad con el vehículo que le precede y de centrarlo en la calzada; incluye la frenada activa de emergencia con detección de ciclistas y peatones; y la alerta de ángulo muerto. Por otro, va equipado con cuatro cámaras para facilitar las maniobras de aparcamiento o para atravesar zonas estrechas; e incluye una tableta de 9,3 pulgadas que informa, incluso, de los precios de los carburantes en las estaciones de servicio de los alrededores.
El nuevo Captur amplía y renueva también sus motorizaciones, tanto en gasolina como en diésel. Con cambio manual de cinco o seis marchas, o automático de doble embrague y siete relaciones, los nueve motores que componen su oferta cubren todo un abanico de potencias: de 100 a 155 CV en gasolina y de 95 a 115 CV en diésel, aparte de cumplir con las últimas normas en vigor y ofrecer niveles de consumo y de emisiones optimizados. A mediados de año llegará la motorización híbrida enchufable denominada E-TECH Plug-in, lo que le convertirá, segúnRenault, en «pionero en la democratización de la tecnología híbrida recargable para todos». Según la marca, sorprenderá por su capacidad para circular en modo 100% eléctrico en el 80% de los trayectos urbanos y para alcanzar hasta 135 kms/h con la fuerza de la batería.
El fabricante desveló ayer los precios de su último lanzamiento, uno de los pocos detalles que faltaban por conocerse. La versión de gasolina oscilará entre los 16.631 y los 25.600 euros y la de gasóleo, entre 20.400 y 24.850 euros.
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