Preocupación entre los regantes del Adaja ante el escaso caudal del río desde el viernes
Los agricultores de la zona no comprenden por qué nos les llega agua si el embalse que regula el río se encuentra al 91% tras las lluvias de la primavera
«Preocupación» entre los regantes de Matapozuelos que utilizan el Adaja para dar de beber a sus cosechas. Desde el pasado viernes, denuncian, el río ... prácticamente no lleva agua hasta la zona en la que se ubican sus tierras, poco antes de que a su caudal se una el del Eresma, y esto les supone un problema que «no entienden» cuando el embalse del Castro de las Cogotas que regula el río se encontraba ayer al 91,6% de su capacidad, un 20% más que la media de los últimos diez años.
El propio Conrado Íscar, alcalde de Matapozuelos -y presidente a su vez de la Diputación de Valladolid-, admitía ayer a este diario que, además de en boca de sus vecinos, también ha tenido conocimiento de este hecho a través de la Junta Agropecuaria Local de Medina del Campo. «Los agricultores están cabreados», aseguraba el regidor, que considera que se trata de un sector al que esta situación le «afecta mucho» y más aún ante la coyuntura económica en la que se encuentra el país por la pandemia de la covid-19.
«Van a llegar hasta donde haya que llegar», enunciaba Íscar haciéndose eco de la voz de «una gente sensible con un bien escaso como es el agua que no entiende que este año no estén recibiendo una cantidad suficiente» pese a las abundantes reservas obtenidas después de las lluvias de la primavera.
La situación, de la que ayer no tenía noticias el presidente de la Mancomunidad Tierras del Adaja (que agrupa a una decena de municipios), Guzmán Gómez, ni los alcaldes de Olmedo o Valdestillas -localidades que también baña este río- inquieta a unos agricultores que, como es el caso de Marimar Vañes, en estos días tienen sus plantaciones de remolacha «en pleno crecimiento». Para esta agricultora, que comparte explotación con su familia, es «incomprensible» que se haga pasar a los regantes «por este trance» a tenor del buen estado de salud de los embalses. «Nos están cobrando un agua que no nos llega. No queremos que pase una riada porque todos sabemos lo importante que es este bien, pero sí que llegue lo justo para que podamos regar», solicitaba a la vez que asume que «no es fácil controlar el caudal para que el agua llegue hasta los últimos regantes del Adaja» pero solicita que la situación se arregle lo antes posible. «Se pueden equivocar un día, pero llevamos tres», incidía mientras, recuerda que la fauna del lecho del río, como peces o cangrejos, está sufriendo esta situación.
Mientras, la Comisaría de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) se encontraba ayer evaluando la situación a la espera de obtener datos precisos a lo largo de la mañana de hoy para, en el caso de que se detectara algún problema, ponerle solución.
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