El pregón de Artemio Domínguez inicia las fiestas de Pozuelo de la Orden

Domínguez inició su intervención agradeciendo el honor de ser pregonero, a la vez que recordó el pasado de esplendor de la localidad, cuando tomó su apellido de la Orden de Santiago, teniendo en el Siglo XVI cuatro ermitas, siendo la de Santa Ana la única que se mantiene en pie, que, por su gran belleza, «es necesario darla a conocer».

No olvidó el pregonero su principal función, la de «avisar a los vecinos que ha llegado el momento de aparcar las preocupaciones del trabajo diario y la rutina». En este sentido, les recordó que la fiesta es algo esperado, días en los que «el pueblo tiene que estar unido en la alegría, en la hospitalidad». Además, expresó que tiene que ser una ocasión «para relacionarse, para hacer una parada en la ajetreada vida diaria, para mostrar lo mejor de sus habitantes». Por eso, animó a «saborear la convivencia y disfrutarla sin prisa, despacio muy despacio», pero también a «acoger a los que estas tierras llegan a la luz de la fiesta».

El pregonero aprovechó la ocasión para agradecer a la localidad su solidaridad con la Asociación Española contra el Cáncer en su participación cada año en la marcha al caserío de los Villares junto con los pueblos de Morales, Tordehumos y Villagarcía en «una apuesta por la vida». Las fiestas se prolongarán hasta el próximo jueves con actividades infantiles, degustaciones, comidas populares y bailes, entre otras actividades, siendo el día más importante el miércoles cuando se celebre la festividad de la patrona, Santa Ana.