Miguel Ángel Alonso durante el pregón en la iglesia de Santiago El Norte

Valladolid

Miguel Ángel Alonso pregona las fiestas del Cristo de la Vega de Tordehumos

El que fuera linotipista de El Norte de Castilla durante más de 30 llevó a cabo un divertido recorrido por la historia de las peñas en la localidad

Viernes, 12 de septiembre 2025, 20:13

Siempre es importante reconocer la labor de todos los vecinos y allegados que, de forma desinteresada, han aportado su granito de arena para hacer mejor ... la vida de los demás. Un reconocimiento que, a sus 75 años, le ha llegado a Miguel Ángel Alonso en el honor de ser este viernes el pregonero de las fiestas del Cristo de la Vega de Tordehumos, el pueblo en el que hace más de medio siglo llegó de su Villabrágima natal de la mano de la que iba a ser su esposa, María Paz Lobato, a la que fueron dirigidas las primeras palabras de agradecimiento por deberla a ella estar en Tordehumos. Palabras de gran emoción a las que se sumaron las que el pregonero dirigió también a todos los vecinos para darles las gracias por las numerosas muestras de apoyo recibidas cuando en 2008 falleció su hija María Paz a los 31 años en accidente de tráfico. En el acto estuvieron presentes la reina, dama, principie y princesa de las fiestas.

Publicidad

A la Asociación Cultural Cristo de la Vega corresponde la organización de este pregón de las fiestas del Cristo de Vega, que en el presente año ha querido que girara en torno a las peñas y su importancia, de ahí que, bajo la dirección de Inés Olandía, se haya instalado en la sede la exposición Entre las limonadas y las peñas, con la muestra de fotografías, camisetas y pañuelos, entre otros objetos, que, a más de uno, han despertado los recuerdos de su juventud. En este sentido, en el pregón se hizo un homenaje por su labor en el inicio de las peñas a Jesús García Cartón, que falleció hace unos años.

Una actividad dinamizadora de las peñas en sus inicios que también llevó a cabo el pregonero, que es hijo de Natividad Sanabria, la abuela de Villabrágima, de 108 años, recordando en el inicio del pregón a los vecinos de Tordehumos que en su pueblo también hay apodos, trayendo al presente a Chuqui, Chota, Borrasca, Ninuco o Boardilla, entre otros, en medio de las risas de los presentes, pues a su llegada al pueblo siempre le habían dicho que era una costumbre de Villabrágimá. A continuación, con la presencia de numerosos vecinos y allegados, que llenaron la iglesia de Santiago, el pregonero, con tono festivo, relajado y a veces irónico, llevó a cabo un recorrido por la historia de las peñas ahumadas en aquel inicio a finales de los años 60 cuando las conocidas como limonadas se convirtieron en las primeras peñas, de las que recordó, entre otras, Los Chupetones, La Pájara Pinta, El Adobe o Los Jóvenes Carrozas, a la que él mismo perteneció.

Fue el momento de contar un buen número de anécdotas, como cuando después de una larga noche de baile y fiesta, las peñas realizaban la cencerrada, atando a un remolque un bidón de hierro que iban arrastrando por las calles en medio de un ruido ensordecedor. Era entonces «cuando nos llamaban de todo menos por nuestro nombre, pero siempre sin problema y en buena armonía». También Alonso recordó las vaquillas celebradas, a modo de plazas de toros, en el yeguarizo, donde en tiempo se reunía el ganado vacuno y caballar para llevarlo a los prados. Al final de las fiestas se vendía la vaca para sacar un dinero con el que alquilar una orquesta para Nochevieja.

Publicidad

El pregonero avanzó en su historia con la fundación de nuevas peñas, ya por los hijos de su generación, como Tambanazo o Sendero Luminoso. Y poco a poco los nombres se fueron complicando con Diablos, Pk2 o La Mafia, «pero incluso se ha llegado al Orgasmo», todo ello entre risa, pero sin olvidar mencionar la grandeza de que se siguen creando nuevas peñas como la de Huevos y Bacalao, incluso una para niños que lleva el nombre de La del pulpo. Las últimas palabras de Miguel Ángel Alonso fueron un verdadero alegato con un «animamos a las nuevas peñas y a todos en general a que sigan animando las fiestas y colaborando lo más posible», añadiendo que «si las peñas, toda la juventud en general, y los no tan jóvenes, no estamos unidos las fiestas irán a menos, porque esa es la esencia de la fiestas, las peñas».

Tras el pregón tuvo lugar el tradicional toro de fuego, que dio paso al recorrido de las peñas al son de las músicas de los dulzaineros Zarabandos con premios a las peñas de mejor pincho y mejor bebida. La jornada llegó a su fin con la macrodiscoteca Sonido Benavente. El programa de este sábado contempla un parque infantil por la mañana, llegando al mediodía para degustar una gran paella en la ermita. Por la tarde, se celebrará la actuación mariachi México en el corazón. Con la cena popular con huevos con chorizo y lomo se repondrán fuerzas para encarar las últimas horas de la jornada festiva con la macrodiscoteca Onda Futura. El domingo, la localidad celebrará, como cada 14 de septiembre, la festividad del Cristo de la Vega, con misa a media mañana en su honor en la ermita. Por la tarde, el Centro Multiusos San Miguel acogerá la actuación del grupo musical Wateke, dando paso al sorteo y entrega de premios, antes de que las fiestas lleguen a su fin con la doscomovida Deja Vu.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3€ primer mes

Publicidad