Lino Rodríguez celebra San Roque en libertad en Peñafiel mientras se resuelven sus recursos a otras tres condenas

Rodriguez, que está cumpliendo en una prisión del País Vasco, fue sentenciado a dos años y ocho meses de cárcel por las facturas falsas que utilizó para justificar las subvenciones que la Junta concedió entre 2009 y 2010 a la sociedad patatera Campo de Peñafiel, de la que Rodríguez era administrador único. Se le impuso también una multa de 1.567.007 euros, con un día de privación de libertad por cada 5.000 euros impagados. Al no abonar dicha multa, a la pena de prisión inicial se le ha sumado un año más. Rodríguez disfruta de unos días de permiso penitenciario en Valladolid tras cumplir buena parte de esta condena, la única que es firme hasta el momento.

Rodríguez, que lleva en prisión desde abril de 2019, está pendiente del resultado de los recursos de casación presentados por su defensa contra otras tres sentencias condenatorias. La que contempla penas más elevadas es la del denominado caso Asaja y Operación Cebada, por la que la Audiencia Provincial de Valladolid le impuso diez años y cuatro meses de prisión. El principal argumento de los recursos planteados a las sentencias de instancia por parte del reo es la prescripción de los delitos que se le imputan. De cinco procedimientos judiciales abiertos contra él, salió absuelto de uno.

La última entrega del culebrón judicial en el que está inmerso el exdirigente agrario desde que se abrió en 2012 la investigación por su gestión en Asaja a raíz de una denuncia del extesorero de la organización, fue el pasado mes de junio. La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Valladolid desestimó los recursos de Lino Rodríguez, Gerardo Rico y Enrique Vallejo presentados contra la sentencia del Juzgado de lo Penal 1 dictada contra la excúpula de Asaja Valladolid. El fallo de este quinto proceso judicial contra el exlíder de la organización agraria le condena a él y a cada uno de sus otros dos compañeros de banquillo, como autores de un delito de falsedad de documento mercantil en concurso ideal con un delito de imposición de acuerdo lesivo, a dos años de prisión y multa de 2.160 euros.

Los tres acusados simularon la celebración de una asamblea general de la sociedad cooperativa Campo Abierto, sectorial de Asaja Valladolid, levantando un acta falsa, «todo ello con el fin de tomar el control de la sociedad sin contar con sus socios». Igualmente, el fallo considera que Lino Rodríguez y su lugarteniente, Gerardo Rico, «obstaculizaron el derecho de los socios al no facilitarles la documentación e información requerida, negándose a convocar las asambleas generales previstas legalmente», se indica en la sentencia.

Todo el control de la organización y de las sociedades satélites, subraya la sentencia, estaba en manos de Lino Rodríguez y sus colaboradores, así como «la forma completamente irregular, por no darle otro calificativo, en las que funcionaban estas sectoriales», subraya el magistrado ponente. Este enmarca el delito en el contexto de las desavenencias surgidas en Asaja en 2012 como consecuencia de la gestión de Rodríguez al frente de la organización, que dio lugar al proceso de la Operación Cebada.

Esta es la cuarta condena que enfrenta el que fuera presidente de Asaja Valladolid entre 1990 y 2014. En este procedimiento se investigaba falsificación de un acta del día 2 de agosto de 2013 de una asamblea general en la Sociedad Cooperativa Agropecuaria Campo Abierto, de la que era vicepresidente Lino Rodríguez, dirigida a lograr el control de la misma, así como otras actuaciones que obstaculizaron los derechos de los socios al no facilitar información, no convocar asambleas ni aportar las cuentas. En concreto, cuenta en su haber con una condena de diez años y cuatro meses de prisión por el caso Asaja, también denominado Operación Cebada, por delitos económicos, entre ellos con tarjetas 'black', cometidos en la OPA entre 1990 y 2014; otra de dos años y ocho meses por fraude en el cobro de subvenciones a la Junta, (la única firme en este momento), y otra más de dos años y seis meses por estafa y administración desleal, con lo que acumula penas de más de 17 años de privación de libertad.

Sin embargo, Rodríguez salió exculpado de otro proceso celebrado contra él, su esposa y el exmiembro de la junta directiva de Asaja Enrique Vallejo, tras la sentencia absolutoria dictada por la Audiencia de Valladolid en la que se dirimía la falsificación de un contrato para cobrar casi 28.000 euros a la organización por servicios prestados por la asesoría Sodeprin, de la que los dos primeros eran administradores.