Primera multa a un VTC en Valladolid por un servicio urbano: 4.001 euros
Los policías sorprendieron al infractor una hora después de la entrada en vigor de la nueva ley y la grúa retiró el coche por carecer de seguro
Apenas una hora había transcurrido desde la entrada en vigor de la nueva normativa que limita los servicios prestados por los denominados VTC (Vehículo ... de Transporte con Conductor), que en adelante solo pueden ser interurbanos, cuando los policías locales detectaron al chófer de uno de estos vehículos realizando un servicio prohibido en un lugar tan concurrido, y cercano a la parada de taxis más conocida de la capital, como la plaza de Poniente. Era la una de la mañana del sábado y el monovolumen, negro y con las distintivas placas azules, dejó a su pasaje en la esquina con la calle San Lorenzo. Había realizado un servicio dentro del casco urbano, algo prohibido expresamente desde las 00:01 horas de ese mismo día, 1 de octubre, salvo contadas excepciones. Los agentes comprobaron que había recogido y dejado a su cliente dentro de la ciudad y tramitaron la primera multa por este motivo registrada en la ciudad. El chófer tendrá que enfrentarse ahora al pago de una abultada sanción administrativa de 4.001 euros por realizar un servicio prohibido.
Los agentes, además, comprobaron que el titular del vehículo, un monovolumen Dacia, tenía caducado el seguro obligatorio, una infracción castigada con una multa mínima de 601 euros. Así que el VTC fue finalmente retirado por la grúa municipal ante la atenta mirada de los taxistas apostados en la parada de Poniente, algunos de los cuales no dudaron posteriormente en aplaudir la intervención policial.
La nueva normativa establece que las licencias VTC solo habilitan para realizar el «transporte interurbano de viajeros»
Los propios taxistas habían solicitado con anterioridad a la entrada en vigor de la nueva normativa que regula las licencias VTC un incremento de la vigilancia sobre la actividad de dichos vehículos, algo que los agentes municipales, a través de su equipo de transportes, ya venía realizando con anterioridad y que volvieron a hacer a lo largo de todo el fin de semana de manera expresa. Solo tramitaron, eso sí, una multa por el citado servicio urbano detectado en Poniente.
En vigor desde el 1 de octubre
La última modificación del real decreto 13/2018 de ordenación de los transportes terrestres estableció de forma expresa que las licencias VTC «habilitarán exclusivamente para realizar transporte interurbano de viajeros», es decir, que los chóferes de este tipo de vehículos pueden recoger pasajeros en el casco urbano si su destino está fuera de la ciudad o a la inversa, pero nunca realizar un servicio dentro de la urbe, algo reservado ahora a los taxistas. Dicha ley, en cualquier caso, estableció una moratoria de cuatro años para permitir a los chóferes de VTC que así lo acreditaran poder realizar servicios urbanos para rentabilizar la inversión realizada en su día. El plazo expiraba precisamente a partir de la medianoche del 1 de octubre. Algunos, si así lo solicitaban y recibían la pertinente autorización del Ministerio de Transportes (en Castilla y León no están regulados los servicios de VTC), podían recibir hasta dos años de ampliación de la licencia para realizar servicios intraurbanos.
El chófer sancionado en la madrugada del sábado en Poniente no acreditó haber recibido la pertinente licencia para realizar servicios urbanos. La multa por esta infracción asciende a 4.001 euros.
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