Los peatones podrán pasar desde hoy por el túnel de vehículos de San Isidro en Valladolid

El anunciado corte del carril derecho del túnel de vehículos de San Isidro (en sentido de entrada hacia la plaza de La Circular) causó los primeras problemas desde primera hora de la mañana de ayer con las previsibles retenciones de vehículos, en especial, en las horas punta. Los operarios municipales dejaron lista la hilera de separadores (los populares 'new jersey'), llenos de agua para evitar sustos, para proteger desde hoy mismo, y durante un mes entero, el paso de los viandantes por este carril habilitado para el tránsito peatonal con motivo del corte del paso peatonal bajo las vías, situado justo al lado, que también hoy comenzará a ser rehabilitado.

Así que los conductores, por un lado, se encontrarán con un carril de entrada a la ciudad por el paseo de San Isidro cortado nada más pasar el cruce con la calle Cigüeña hacia el túnel y los peatones, por otro, compartirán espacio durante las próximas semanas con los coches en una solución inédita en la ciudad que busca evitar el aislamiento de los miles de vecinos que a diario pasan por el subterráneo que une Pajarillos y Delicias con el centro.

Los carteles informan desde ayer de esta solución de movilidad para los vecinos y de la reducción de la velocidad a tan solo veinte kilómetros por hora para los conductores que se dirijan a la Circular por el único carril abierto para vehículos. El corte complicará sobremanera la circulación en esta vía principal de entrada al centro urbano desde la carretera de Soria (y el polígono de San Cristóbal) al sumarse a los cortes que también sufre desde hace más de un mes la avenida de Segovia, donde también está habilitado un único carril de circulación, en este caso en cada sentido (allí la situación durará otros cuatro meses), por la urbanización de la calle.

En cuanto a los trabajos en sí en el paso peatonal de San Isidro, que estará cerrado desde hoy, allí se va a sustituir el firme, pintar sus paredes (en ellas no cabe una pintada más) y renovar las barandillas. Una intervención similar a la prevista en los túneles peatonales de Arco de Ladrillo (las obras han comenzado ya) y Labradores (los trabajos aún no han empezado), si bien en los dos pasos se dejará un pasillo para que puedan pasar los viandantes.