Iberdrola agrupará a más de 200 de sus empleados en la nueva sede de Argales

El edificio de dos plantas se levanta sobre una superficie de unos 1.500 metros cuadrados, y está ubicado en la parcela que Iberdrola tiene junto a la avenida de Zamora. La eléctrica ya disponía de otra sede con oficinas en el solar de Vázquez de Menchaca, pero hace meses decidió ampliar el espacio con otro pegado, donde irá también un almacén.

De este modo se trasladarían al nuevo inmueble la totalidad de los empleados que se encuentra actualmente en los centros del paseo de Isabel La Católica y en María de Molina. Este personal está destinado a las áreas de Iberdrola Clientes y de Redes Inteligentes, antes denominado Iberdrola Distribución (Eléctrica (I-DE).

También se trasladarán los trabajadores de Relaciones Institucionales y de administración de las dos oficinas que Iberdrola tiene como propias en el centro de Valladolid. De este modo, la compañía dejará de ocupar dos plantas de María de Molina, donde trabajan alrededor de 70 personas. En ambos casos, la empresa reconoce que el traslado supondrá un ahorro de alquileres, así como la optimización de una parcela que es de su propiedad, y donde se encuentra parte del control de redes de su suministro.

Fuentes de Iberdrola indicaron que entre «los objetivos de esta ampliación se encuentra el de asegurar la separación y funcionamiento independiente de las diferentes áreas del grupo. De este modo, las nuevas oficinas de Iberdrola optimizarán las infraestructuras actuales, concentrando a la plantilla en un centro eficiente y moderno dotado de las últimas tecnologías y de un equipamiento adaptado a las necesidades de los puestos de trabajo».

La eléctrica espera con esta reorganización de infraestructuras y centralización de servicios comunes aprovechar las sinergías. En este sentido, fuentes de Iberdrola recuerdan que este cambio supone «reforzar la presencia» de su plantilla en Valladolid.

Las obras de construcción del nuevo inmueble finalizarán a finales del año que viene, y la previsión es que el traslado se realice a inicios de 2021. La llegada de los doscientos trabajadores al polígono de Argales conllevará no solo el abandono de empleados de la zona centro, sino un aumento de la actividad de este área industrial que se vio muy afectada en los años de crisis por la salida de empresas. Por el contrario, en los últimos dos años, las parcelas del viejo polígono han vuelto a recuperar actividad comercial, con la instalación de supermercados, gasolineras 'low cost', y de centros de ocio y deporte. Las oficinas urbanas donde se atiende a clientes (Parquesol, paseo Zorrilla, Panaderos y plaza de Poniente), que no son propias seguirán.