Heredar saldrá más barato este año y jubilarse, más caro

Este año vuelve a endurecerse el acceso a la jubilación y la edad legal de retiro para quienes hayan cotizado menos de 37 años es de 65 años y 10 meses, dos meses más que en 2019. Para cobrar el 100% de la base reguladora es preciso tener un historial de cotizaciones de al menos 35 años y 10 meses. Además, dentro de los cambios que entran en vigor todos los años desde la reforma progresiva del sistema acordada en 2011, se amplía el número de años cotizados para el cálculo de la pensión de jubilación hasta los últimos 23 de la vida laboral (el año pasado eran 22).

Por lo que respecta a la cuantía de las prestaciones contributivas, por el momento los pensionistas todo lo que tienen 'en mano' es el compromiso de Pedro Sánchez de subirlas el 0,9% –la previsión de inflación– cuando se forme Gobierno. En cuanto a las pensiones mínimas, la subida avanzada sería del 3%.

Y si jubilarse saldrá un poco más caro en 2020, heredar será algo más barato, en concreto para los familiares de primer grado que reciban un legado de más de 400.000 euros. Esta es la cantidad exenta hasta ahora y la que desaparecerá cuando, a mediados de año, entre en vigor la modificación del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones promovida desde la Junta que gobiernan el PP y Ciudadanos. El coste fiscal de herencias y transmisiones lucrativas entre cónyuges, padres e hijos se limitará al 1% sea cual sea el caudal hereditario.

Mientras esta reforma se encuentra ya en su recta final y está previsto que entre en vigor a mitad de año, la del IRPF que pretende impulsar el Ejecutivo del PSOE y Podemos carece por el momento de fecha. Sobre el papel consiste en incrementar dos puntos los tipos impositivos sobre la base general para los contribuyentes con rentas superiores a 130.000 euros y cuatro puntos para la parte que exceda de 300.000 euros.

Otra de las (posibles) novedades tiene que ver con los autónomos, para quienes la coalición de izquierdas quiere establecer un sistema de cotización por ingresos reales que mejore sus prestaciones de desempleo, enfermedad o jubilación. Y si el Gobierno central está dispuesto a 'tocar' todos los impuestos que haga falta, el autonómico ya ha dejado claro que su intención en toda la legislatura es la de no subir los suyos.

Mientras los salarios en convenio recogían hasta el pasado septiembre enCastilla y León una subida media del 1,8%, por debajo tanto de la recomendación de patronal y sindicatos –entre el 2% y el 3%– como de la media nacional –del 2,3%–, los empleados públicos tienen la promesa del Gobierno de subirles este año el 2%, más otro 0,3% de fondos adicionales.

En ausencia de Presupuestos, las previsiones enviadas por el Gobierno en funciones a Bruselas hablan de un incremento medio en la remuneración de los trabajadores del 2,2%, con una estimación de subida del IPC del 1,2%, lo que de cumplirse significaría ganancia de poder adquisitivo. Por otro lado, la intención del bipartito PSOE-Podemos es elevar el salario mínimo de 900 a 1.000 euros (11%) este mismo año, tras subirlo el 22% el pasado.

A la espera de saber en qué se materializan las iniciativas gubernamentales encaminadas a topar la subida de los alquileres, en materia de vivienda las previsiones de los agentes inmobiliarios apuntan a un encarecimiento tanto de los precios de compra (entre el 2% y el 4%) como del alquiler (entre el 4% y el 6%).

El euríbor, que en diciembre se situó en el -0,266%, continuará en negativo durante todo el ejercicio, una vez descartada una subida a corto plazo de los tipos de interés por parte del BCE. Para contrarrestar este hecho, las entidades financieras seguirán con su política de aumentar las comisiones a los clientes.

Para terminar este recorrido por el amplio y a veces incierto espectro de costes y precios, en 2020 también tendrá su protagonismo lo que pueda suceder –y en qué se traduzcan– los anunciados impuestos a los servicios digitales ('tasa Google') y a las transacciones financieras ('tasa Tobin'), así como al diésel. De momento, la gasolina de 95 octanos empieza 2020 el 10% más cara de lo que comenzó 2019 y el gasóleo, el 8%.