El frenazo económico de los hogares vallisoletanos repercute en el pequeño comercio local
La población ha generado nuevos hábitos en los estilos de vida, lo que supone un cambio en la lista de la compra
MIRIAM CONDE
Valladolid
Sábado, 2 de noviembre 2019, 08:21
Todos los que ahora superan la veintena de edad recordarán las largas colas que era necesario esperar en las tiendas de Valladolid al salir de ... compras, el camino a casa con varias bolsas en la mano y acabar con la expresión: «¡Otra vez he vuelto a picar!». Hoy, las calles están repletas de viandantes y cientos de comercios se convierten en un mero adorno para ellas. Los curiosos escaparates y sus llamativas ofertas invitan a entrar. Es la hora punta. Una multitud de padres camina con sus hijos –que acaban de salir de las actividades extraescolares– por la calle Santiago, una pareja transita por la calle Mantería y un grupo de jóvenes está sentado en un terraza de la Plaza Mayor disfrutando de un rato junto a sus amigos. Pero, ¿por qué no entran a las tiendas?, ¿están cambiando los hábitos de consumo?
La evolución de la población trae como consecuencia una transformación en su estilo de vida y en sus prioridades económicas. En tan solo unos años se ha generado cierto tipo de necesidades que han sustituido la lista de la compra. El presidente de Avadeco, Alejandro García Pellitero, apunta que han aparecido «nuevos gastos mensuales fijos» basados mayormente en el ocio como son los «cines, gimnasios, academias, plataformas audiovisuales en línea o teléfonos con conexión a Internet para cada miembro de la familia».
Noticia Relacionada
La opinión de Paco Cantalapiedra: Oscuridad
Malas previsiones
La inestabilidad política es otro de los factores que repercute en el descenso de la economía familiar. «Tres procesos electorales en Valladolid en un mismo año no es una situación que invite al consumo», explica Pellitero. Así pues, el Producto Interior Bruto (PIB) del segundo trimestre del 2019 –que creció un 0,4% y el 2% interanual– se saldó con una desaceleración del 0,2% con respecto al trimestre anterior. En este contexto, el gasto en consumo final de los hogares experimentó, en el segundo trimestre, un crecimiento interanual del 0,6%, cinco décimas menos que en los tres anteriores y un punto y medio menos de lo que crecía en el mismo periodo del año anterior. Según el Banco de España, la previsión para los meses finales del año es una rebaja del 0,1% en la evolución del PIB.
La peletería Villarramiel Piel, ubicada en la calle Duque de la Victoria, ha notado un descenso «muy acusado» en las ventas estos últimos meses a pesar de la escasa competencia a su alrededor. «Creo que la gente tiene miedo al devenir de su economía», cuenta Eugenia Ramos, vendedora de la tienda. Otro de los inconvenientes de los locales es su lucha por la supervivencia frente a las «altas rentas» que les imponen los dueños del local. «La realidad es que el pequeño comercio funciona cada vez menos», explica Eugenia, que pasa la mayor parte de su jornada «de brazos cruzados».
La exclusividad es lo que hace que Oh! Luna, una tienda de la calle San Felipe Neri, no se pueda quejar. «Siempre tengo trabajo acumulado», afirma Cristina Martín, la dueña del establecimiento. Desde este pequeño, pero colorido local, ofrecen el hecho de personalizar los regalos y eso es lo que les hace «destacar» en el mercado.
Héctor Prieto, dependiente de la papelería Hija de Luis Fernández A. Marcos, también acumula muchas horas sentado frente al ordenador a la espera de clientes. «Sin duda, 2019 ha sido el peor año», afirma. Los últimos meses han tomado la decisión de ampliar el catálogo con «poca mejora».
Además, esta tienda tiene un público «muy envejecido» que demanda «pocas cosas y solo en temporada escolar con la compra de agendas y algún que otro bolígrafo», expone el comerciante. El comercio local coincide en la propuesta de una mejora de la accesibilidad para promover las ventas. La encargada de la tienda Deportes Halcón, Leticia Platón, piensa que el mayor inconveniente de la zona centro es el aparcamiento y una de las soluciones que plantea es «la exención de abonar el billete de autobús o el tiquet del aparcamiento por cada compra superior a un importe prefijado» y, de este modo, «muchas más personas se interesarían por la compra a pie de calle».
La reciente obra del parking de la Plaza Mayor y los cortes de tráfico por las restauraciones de la vía pública del centro de la ciudad han hecho que la población «prime la comodidad» y «compre en centros comerciales e Internet», argumenta el presidente de Avadeco.
La marcha del centro
La huida de los edificios públicos de la Junta de Castilla y León –el Servicio Territorial de Hacienda y la Tesorería General de la Seguridad Social– del centro histórico, de los cines y de las decenas de pequeños negocios, denominados «de toda la vida», ha repercutido «gravemente» en la economía local. «Ahora no hay gente en la tienda ni por la mañana ni por la tarde», se lamenta Héctor. Los –pocos– negocios abiertos se confrontan así con los antiguos comercios cerrados que dejan entrever un pasado activo y dinámico que, por el momento, no augura un mejor futuro.
Un total de 50.000 premios directos y 5.000 euros en cheques regalo. Esta es la propuesta conjunta de Fecosva y la Cámara de Comercio –con el apoyo del Ayuntamiento de Valladolid– para resaltar la importancia de comprar en el pequeño comercio. Son más de 300 tiendas las que participan en la campaña que comenzó el día 14 de octubre y que se prolongará hasta el próximo 16 de noviembre. Bajo el nombre 'El comercio da vida a tu ciudad', se pretende incentivar las ventas y mostrar la amplia oferta que ofrecen los locales más próximos al ciudadano, tanto en el centro como en los barrios.
En campañas anteriores, los establecimientos que participaron tuvieron «un crecimiento en las ventas entre el 8% y el 10%», añade Mila Aguado, gerente de Fecosva. Además, por una compra superior a seis euros, el consumidor recibirá una papeleta con la que tendrán garantizados múltiples premios, como cheques de 20 euros, una bolsa de tela reutilizable, un descuento del 10% para desembolsar en el mismo establecimiento o un descuento en carburante de 0,10 euros por litro.
El ocio y el tiempo libre lideran la inversión del consumidor
La creación y mejora de las nuevas tecnologías se orienta al consumidor –cada vez más joven– para una compra práctica, lúdica y rápida. Los productos de deporte, los viajes y la tecnología lideran la clasificación de los productos en los que invierte el consumidor de manera más habitual, según un estudio llevado a cabo por el Observatorio Cetelem del consumo en España en lo que llevamos de año.
La intención de compra de cara a los próximos meses no varía y los viajes se posicionan en cabeza. Además, el sector de los videojuegos se hace un hueco cada vez mayor en la economía de los hogares. Este cambio hace que la gente «pase menos tiempo en la calle», cuenta el presidente de Avadeco, Alejandro García Pellitero. Añade, además, que la disminución en la renta y el endeudamiento de la vivienda hacen que «se priorice» el ahorro y los nuevos tipos de consumo fijo más orientados al ocio y al tiempo libre. «Lo más habitual es que en cada hogar haya suscripciones a plataformas para la visualización de contenidos digitales, gimnasios, fibra óptica e, incluso, varios viajes al año», asegura Pellitero. Se ha generado de este modo un hábito que trae consigo la «escasa necesidad» de desplazarse al centro histórico como rutina, únicamente para el alterne en bares y discotecas.
A la hora de elegir la forma de pago, la tarjeta de crédito (es sus diferentes modalidades) es la preferida por los consumidores para realizar sus diversas compras. «Casi siempre me pagan con tarjeta», manifiesta Eugenia Ramos, dependienta del comercio Villarramiel Piel. «La comodidad puede ser una de las causas por las que la gente tiende a utilizar menos el efectivo, aunque todavía tiene gran protagonismo», concluye el presidente de Avadeco.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión