La familia de Teresa opta por la incineración para agilizar su regreso a Valladolid

«Quieren volver a casa cuanto antes y, por eso, han decidido incinerar a Teresa», han señalado fuentes cercanas a la familia, que está siendo apoyada y asesorada por el personal del consulado español en Bruselas.

Los padres de Teresa ya habrían obtenido la autorización judicial para la incineración de la joven, así como el certificado de defunción, que les permitirá regresar a Valladolid en los próximos días con las cenizas de su hija.

«A su regreso tienen previsto realizar algún tipo de acto en recuerdo de Teresa», apuntan las fuentes consultadas, que trasladan el agradecimiento de la familia por el trato y el cariño recibido, así como el apoyo permanente desde su llegada a Bruselas.

El agente de Guardia Civil, de 24 años y acusado del crimen, se encontraba realizando sus prácticas en el puesto de Portillo antes de viajar a la capital de Bélgica. El joven permanece ingresado en estado grave, detenido e incomunicado en un hospital de la ciudad, tal y como afirman fuentes de la subdelegación del Gobierno en Valladolid.

Este miércoles el Instituto Condesa Eylo Alfonso, donde la joven cursó su última etapa educativa, ha convocado un minuto de silencio en señal de repulsa por el asesinato de la joven de 23 años. «Siempre estuvo muy implicada, al igual que su familia, en las actividades y la vida escolar. Era una niña encantadora y sentimos enormemente su pérdida. Tenía toda la vida por delante y una carrera prometedora», ha señalado el director del centro educativo, Iñaki Becoechea.

Este acto se suma a la concentración convocada el sábado por la Asociación de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos de Valladolid (Adavasymt), que congregó a cerca de medio millar de personas, amigos y familiares de Teresa en la Plaza de Fuente Dorada para decir basta a este tipo de asesinatos.