Castilla y León descarta reducir a 1,2 metros la distancia entre pupitres como propone el Gobierno
La consejería de Educación mantendrá las mismas restricciones que el curso pasado y a los 1.350 docentes de refuerzo
La consejera de Educación de la Junta, Rocío Lucas, reclamó hoy «un fondo adicional para ayudar a las comunidades autónomas a sufragar los ... gastos» derivados de la adaptación educativa al coronavirus. Fue su principal argumento en la reunión de la Conferencia Sectorial de Educación, que reunen Madrid a todos los responsables de las 17 comunidades y a la nueva ministra del ramo, Pilar Alegría. El argumento de Lucas refuerza lo que ya expuso ante el Gobierno el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
Solo en refuerzo de profesores, la región ha tenido que garantizar para el curso 2021-2022 el compromiso de mantener los contratos de los 1.350 docentes de refuerzo contratados el pasado año. En este sentido, Rocío Lucas defendió en Madrid su apuesta por mantener las mismas medidas de protección sanitaria que el curso pasado para garantizar la presencialidad en todas las etapas educativas ante el inicio del próximo curso escolar.
Lucas insistió ante la ministra Alegría que «el curso ya lo tenemos organizado» toda vez que el pasado mes de junio ya hicieron el planteamiento de cómo querían que fuera este inicio, basado en las «mismas medidas» de seguridad que se aplicaron el curso pasado, como la distancia máxima entre alumnos de 1,5 metros (la Junta rechaza en principio la posibilidad de reducirlo a 1,2 metros como ofreció el ministerio). El resto de medidas complementarias también resultaron «satisfactorias», valoró.
Más información sobre el curso escolar
Los datos avalan este argumento, con un nivel de contagios en las aulas que no superó el 2% del total y una baja incidencia tanto entre la comunidad escolar como personal de servicios. Es por eso que en este encuentro con la ministra Lucas volvió a plantear un curso «similar» al anterior, frente a otras comunidades que «siguen apostando por una relajación de medidas».
La Junta de Castilla y León quiere garantizar una «presencialidad segura», insistió Lucas para quien el encuentro con el Ministerio que «no ha planteado ninguna novedad». «La quinta ola nos viene a dar la razón, aplicar las mismas medidas para una presencialidad en todas las etapas educativas», remachó.
Así, Castilla y León mantendrá su hoja de ruta para el nuevo curso en ciernes, que incluye mascarilla a partir de los seis años, distancia de 1,5 metros entre las mesas y la única concesión de que las aulas burbuja compartan recreo y las actividades deportivas escolares de equipo podrán practicarse siempre que sean en las pistas al aire libre.
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