Valladolid

La CHD anuncia que abrirá la calle Canal en septiembre tras 19 meses en obras

El primer tramo de la calle Canal de Valladolid, que desde febrero del año pasado permanece cerrada al tráfico de vehículos e incluso al paso de peatones, reabrirá en septiembre tras 19 meses en obras. Así lo ha anunciado este martes la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), propietaria de esta vía perpendicular a la avenida de Gijón y que discurre por el borde de la dársena del Canal de Castilla, tras una reunión mantenida entre la presidenta del organismo, María Jesús Lafuente, y el alcalde de la capital, Jesús Julio Carnero.

Así, si todo marcha bajo las previsiones iniciales, en septiembre ese primer tramo dirá adiós a los bloques de plástico de obra -'new jersey' rojos y blancos- con advertencias pintadas que impiden el paso a cualquiera que no sea vecino de las casas situadas al fondo de la calle, trabajador de las oficinas del organismo de cuenca (el archivo o el laboratorio) o de los restaurantes de la dársena.

La intención de la CHD, propietaria de la vía, es poner en servicio al tráfico dos tercios de la calle Canal, desde su acceso desde la avenida Gijón (tramo comprendido entre el acceso y la ubicación de la empresa Patrimonio Global) pero con restricciones de aparcamiento hasta que finalicen el total de las obras.

Las obras que se están ejecutando, por un importe cercano a los cuatro millones de euros, incluyen la transformación de la calle Canal para dar prioridad al peatón; el incremento de espacios verdes y acondicionamiento de los ya existentes; la modificación del acceso peatonal a la carretera Fuensaldaña para facilitar la comunicación entre el barrio de la Victoria y la Cuesta de la Maruquesa; la sustitución del pavimento de la calzada y aceras por adoquín excepto en las zonas de incorporación a la calle; la apertura de los caminos de sirga al público para hacerlos transitables; además de la sustitución y soterramiento de instalaciones.

Está previsto asimismo por parte de la CHD la rehabilitación de varios edificios y urbanización del entorno de la margen izquierda de la dársena de Valladolid del Canal de Castilla, cuyas obras se iniciarán a finales del 2026, con un presupuesto de 5,8 millones de euros.

Un proyecto que incluye la transformación de los antiguos talleres en un centro de interpretación de la gestión del agua; un centro de interpretación del Canal de Castilla; y una sala expositiva de maquetas de la cuenca del Duero y de varias presas, de 1929. El espacio museográfico será un espacio inmersivo e interactivo para conocer la gestión del agua, la CHD y el Canal de Castilla. En la reunión, se ha hablado también del mantenimiento de los cauces fluviales a su paso por el término de Valladolid, cuya competencia es municipal al tratarse de un tramo urbano.

También se trató sobre dos proyectos, uno en el río Pisuerga, que será ejecutado por Somacyl, y otro en el Esgueva, a cargo del Ayuntamiento. Desde la Confederación se realizan muestreos y análisis en todas las masas de agua superficiales de la parte española de la demarcación hidrográfica del Duero desde el año 2006. Antes de la puesta en marcha de estos programas de seguimiento, y concretamente desde el año 1962, la CHD ya analizaba la calidad de las aguas superficiales en determinados puntos de la cuenca.

Por su parte, Carnero reivindicó proyectos clave para la «transformación urbana y ambiental de la ciudad», en los que puso el foco en la colaboración entre administraciones, «clave para hacer realidad proyectos que mejoren la calidad de vida en la ciudad, potencien nuestros recursos naturales y refuercen el vínculo de Valladolid con sus ríos». Entre los asuntos abordados destacaron el impulso al entorno del Canal de Castilla, para lo que el regidor solicitó «celeridad» en la finalización de las obras en el entorno de la Dársena del Canal de Castilla.

En materia de Medio Ambiente, el alcalde reclamó agilidad en la restauración fluvial y uso sostenible de los dos ríos, con proyectos algunos de ellos financiados con fondos europeos y actualmente pendientes de autorización como son la restauración de las márgenes del río Pisuerga y el Esgueva (2,5 millones de euros); la instalación de observatorios de aves (32.700 euros); y el anteproyecto de la piscina en el río Pisuerga.

En este sentido, el alcalde manifestó que «todos ellos son proyectos necesarios para los cauces fluviales de la ciudad en favor de recuperar el esplendor del propio río Pisuerga, sobre todo en cuanto a su limpieza, necesaria y esperada desde hace muchos años, lo que permitirá a los ciudadanos volver a disfrutar de un entorno inigualable en nuestra ciudad».

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