Una Cabalgata inspirada en el mar y con menos participantes recorrerá calles más anchas por la covid

Sus majestades Melchor, Gaspar y Baltasar estarán acompañados este año por estrellas marinas, medusas o peces en un desfile que partirá de Filipinos para discurrir por el Paseo de Zorrilla, San Ildefonso, Isabel La Católica, plaza de Poniente, Ochavo, calle Lonja, Quiñones y Ferrari y finalizar en la Plaza Mayor, sobre las 20:00 horas, con la tradicional ofrenda en el Belén y el saludo desde el balcón de la Casa Consistorial.

La concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, presentó este lunes el espectáculo que acompañará a los magos de Oriente, una cita que en esta edición contará con un menor número de participantes –265, unos 150 menos de los que son habituales– y un despliegue de seguridad formado por 150 personas, entre agentes de la Policía Local y guardias de empresas privadas, que vigilarán los diferentes espacios para evitar aglomeraciones y controlar que los asistentes siguen la Cabalgata con mascarilla. En la confluencia de Paseo de Zorrilla con Sal Ildefonso, se habilitará una tarima para que medio centenar de niños con discapacidad puedan seguir la comitiva, mientras que las vías más estrechas de la ruta –Lonja y Quiñones– se vallarán para impedir que el público se agolpe en ellas.

Ocho carrozas y dos mil kilos de caramelos blandos aptos para celíacos están ya preparados para acompañar a los Reyes Magos en una cita que quiere ser una metáfora de la salida de la pandemia, a pesar de que esta vuelva a apretar ahora con una sexta ola.

Animales, luz y música

Abrirán el desfile los ángeles de la Fuente de la Fama y la estrella fugaz que anuncia la llegada de la comitiva real. Este pasacalles ha sido creado por la compañía vallisoletana La Luz de las Delicias. A continuación, el montaje 'Les Abyssés', del grupo francés Remue Ménage, traerá hasta tierra adentro una impresionante constelación marina, representación del hábitat más grande del planeta. Una procesión luminosa avanzará por la noche, acompañada por los ritmos de la percusión y sonidos electrónicos. También se desplegará una vía láctea de medusas y estrellas centelleantes, mientras que esculturas efímeras realizadas con globos envolverán al espectador en una sensación oceánica y una gran ola llegará a Valladolid con insólitos animales. Un grupo de bailarines creará imágenes poéticas y futuristas con sus voluminosas faldas para recordar a las esponjas del fondo del mar y acróbatas y artistas con sus cantos y danzas aéreas traerán el frío de las profundidades en un montaje en el que participan también las compañías Artefacte, Parola Bianca y Planete Vapeur.

Las animaciones musicales correrán a cargo de las bandas vallisoletanas La Torzida, Tudo Bem y El Silo. Además, Nuevo Fielato y noventa niños desfilarán delante de los Reyes con una coreografía creada para la ocasión. Asimismo, alumnos de los centros de educación Infantil y Primaria Ponce de León, Isabel la Católica, Alonso Berruguete, Marina Escobar y El Peral acompañarán las carrozas disfrazados con motivos marinos y a la cita no faltará Picoco, el cocodrilo del río Pisuerga.

El presupuesto del espectáculo asciende a 180.000 euros, una cifra similar a la de ediciones anteriores, según señaló la concejala Redondo, quien subrayó que se ha diseñado para que los vallisoletanos disfruten con la máxima seguridad.