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Lorena Sancho Yuste
Jueves, 18 de agosto 2016, 21:43
La localidad de Tudela de Duero clausuró ayer sus fiestas patronales de La Asunción y San Roque tras seis días de una intensa programación de actos taurinos, musicales, infantiles, gastronómicos y religiosos. El encierro con la suelta de los mejores astados lidiados estos días por las calles y el tradicional baile de La Abuela, que resultó muy concurrido, pusieron el punto final. Aderezado todo ello con los huevos fritos que la peña del mismo nombre preparó tras la suelta taurina.
El balance de las primeras fiestas elaboradas completamente por el actual equipo de Gobierno es «muy positivo», según lo consideró ayer el alcalde, Luis Javier Gómez Potente, con una elevada participación en las actividades programadas, especialmente en las de calle, que eran la principal apuesta de este año. «En la paellada, que hacía varios años que dejó de hacerse, se repartieron 650 raciones, las terrazas de los bares han estado animadas con las charangas a la hora del vermú y el teatro de calle y la electrocharanga han tenido mucha aceptación», resumió el alcalde de la localidad.
En general, el municipio ha visto multiplicada su población durante la celebración de estas fiestas patronales, especialmente en la noche del 14 de agosto, cuando miles de personas se dieron cita en la localidad. Las estimaciones del Ayuntamiento hablan de que entre el 13 y el 16 se pueden haber registrado cerca de 20.000 personas cada día en un municipio de 8.000.
Luis Javier Gómez Potente destacó así el resultado «positivo» de las fiestas, a excepción del incidente registrado en la madrugada del día 15 cuando la Policía Local tuvo un problema con un clan familiar.
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