25 bares crean una ruta del pincho para promocionar la hostelería de Parquesol

Benita Gago está «encantada». Le chiflan los pinchos y meterse en los fogones del Miguel Ángel para probar mezclas de sabores. Por ejemplo, la brocheta de salmón, langostino y sepia o el pastel de pimientos que ya está preparando para la primera ruta del pincho de Parquesol, en la que 25 establecimientos del barrio ofrecerán las mejores tapas para promocionar la hostelería de la zona. «Estamos un poquito olvidados; entiendo que a la gente le cuesta desplazarse, pero ésta es una buena oportunidad para demostrar la riqueza gastronómica y de pinchos que también hay en Parquesol», añade Benita. «Es el mejor momento para ir haciendo la rutilla», explica Ana Tejeda, una extremeña detrás de la barra del Rincón de Carlos. Aquí se servirán, del viernes 25 al domingo 27, un pincho moruno con patata y una tartaleta de ensalada de pollo y Ana invita a probar las propuestas de los distintos bares y restaurantes: «En mi tierra se hace mucho, cada bar tiene su especialidad y vas con los amigos de uno al otro».

Por ejemplo, se podrá ir del chorizo con salchicha y las papas del Ubi Bene al sándwich frío y el kirche de jamón y queso de La Chocolatera. Hincarle el diente a las calandracas y la coca fasidia de Mi tierra o el pan relleno de langostino de La Brasería. Degustar la morcilla con pasas y piñones del Lugar de Antonio o el canapé de morcilla con huevo de codorniz y queso de cabra del Aljibe. Guillermo García, del Dáser, sacará a la barra un escabechado con cebolla caramelizada cremas de queso y una ensalada de verano.

¿El precio? Será unitario. De 2,5 euros el pincho más una bebida y el objetivo es claro, potenciar la hostelería del barrio. En Parquesol hay cerca de cien establecimientos. Y ya piensan en utilizar esta ruta del pincho como plataforma para la creación de una agrupación de hostelería en el barrio que vele por los intereses de un sector que se siente «olvidado» por la asociación provincial.

«Hay zonas de la ciudad como ésta, como Parquesol, o como La Victoria, donde hay un nivel muy alto en la hostelería. En barrios como Delicias hay establecimientos con mucho renombre que no tienen la misma publicidad o apoyo que los restaurantes y los bares del centro. Siempre se mira al Paseo de Zorrilla o a la calle Santiago y también trabajamos en otras zonas de la ciudad», explican los convocantes de esta ruta del pincho, que ven esta iniciativa como una magnífica oportunidad para dar a conocer y poner en valor «la profesionalidad, el servicio y la calidad de los productos que ofrecemos los bares y restaurantes de Parquesol», explica Guillermo García.