Una tormenta con granizo interrumpe la ola de calor y corta el polígono de San Cristóbal

El aviso amarillo de la Agencia de Meteorología por riesgo de lluvias intensas en Valladolid para este viernes por la tarde se cumplió, el aguacero no ha decepcionado y el sistema de alcantarillado de la capital ha sido puesto a prueba una vez más. Una tormenta acompañada de granizo ha descargado con fuerza sobre la capital, de forma intermitente, en una jornada que por la mañana había comenzado con las temperaturas más elevadas alcanzadas en Valladolid en lo que va de año. Calles anegadas, caída de árboles y personas fugazmente atrapadas en túneles es el balance de la tromba de agua con granizo, que no ha producido grandes daños materiales pero ha animado la jornada de bomberos y policías.

La tormenta se desató poco antes de las cuatro de la tarde y en ese momento, con 34 grados en los termómetros, se agradecía. En la hora posterior se llegaba a los 2,6 litros por metro cuadrado, precipitación que a las cinco registraban una interrupción. Fue a partir de las seis, ya con 3,8 litros, cuando los tejados comenzaron a crepitar y las calles a tornarse en acequias.

Según información proporcionada por el Cuerpo de Bomberos, el primer aviso llegaba a las 18:01 horas. A partir de ahí, 43 intervenciones, todas por agua, que han ido sucediéndose hasta las 22:00 horas, cuando una dotación seguía achicando una zona inundada en el Paseo Zorrilla.

La Policía Local, que al igual que los Bomberos se ha desplegado por toda la ciudad, ha tenido que cortar el tráfico por la acumulación de agua en el cuadrilátero que forman las calles Aluminio, Pirita y Kripton, en el polígono de San Cristóbal, donde una mujer ha sido extraída de su coche por los Bomberos. Algo similar a lo que ha sucedido en el paso inferior del puente de Tafisa. También se han formado enormes balsas en la carretera de Rueda y en la avenida de Burgos.

Dos personas se han quedado atrapadas en su vehículo y fueron rescatadas en el túnel de La Galana, que cruza por debajo de la VA-30, desde Pinar de Jalón hasta la zona de la factoría de Motores.

Además, como consecuencia de la granizada se ha producido la caída de varias ramas en el Camino del Cabildo, lo que ha obligado a mantenerlo cortado hasta que los Bomberos aseguraron la zona. Éstos informan también del desprendimiento de cascotes en un edificio de la calle Covadonga.

«No han sido actuaciones por situaciones de gravedad, pero sí numerosas –han explicado los Bomberos–. Inundaciones en multitud de vías públicas, garajes y portales. Hemos sacado gente de coches, movido ocho vehículos, recogido ramas y cascotes...».

Recuerdan que «ha habido trombas peores» (sin ir más lejos, el sábado 22 de marzo cayeron 36 litros por metro cuadrado). En total, ayer ha caído en la capital vallisoletana un volumen de 11,5 litros por metro cuadrado en un lapso de seis horas.

«El principal problema al que nos enfrentamos siempre es que la tromba no puede ser asumida por el sistema de desagües y se desborda por las partes más bajas. Hasta que no deja de llover no cesa la saturación», ha explicado el portavoz de los Bomberos.

La sala de operaciones del 112 ha gestionado 40 incidentes debidos a la tormenta entre las 18:00 y las 19:30 horas, que ha obligado también a desplegar medios de la Agencia de Protección Civil y Emergencias. En esa hora y media se recibieron más de 70 llamadas relacionadas con la tormenta de lluvia y granizo. En todos los incidentes se dio aviso a los servicios correspondientes en cada caso, Bomberos de Valladolid, Policía Local, Cuerpo Nacional de Policía y Centro Coordinador de Emergencias de la Junta de Castilla y León.

La mayoría de avisos han sido por inundaciones (28), seguidos de obstáculos en la calzada y peligros de circulación (7), caída de objetos (2), filtraciones y fugas de agua. No ha habido heridos ni afectados en ninguno de los incidentes gestionados.

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