La presunta amenaza de Reguera a un policía local provoca la mayor crisis del mandato de Luquero
Los grupos de la oposición piden su dimisión o cese y Centrados anuncia una moción de censura contra la alcaldesa si el concejal sigue en su puesto
A estas alturas, cuando comienza el cuarto y último año del mandato municipal, en plenas Fiestas de San Juan y San Pedro, el Ayuntamiento de Segovia se enfrenta a la mayor crisis política de esta etapa, de la presidencia de Clara Luquero. Los grupos de la oposición han hecho piña para pedir el cese o la dimisión del primer teniente de alcalde, Alfonso Reguera. Todo viene de unas palabras dirigidas por este a un policía local, con la presunta amenaza de darle «dos hostias». Reguera defiende que fue en todo «coloquial e informal» y ha pedido disculpas, pero los grupos de la oposición van a por él. Centrados, el más beligerante, amenaza con una moción de censura contra Clara Luquero.
El concejal no niega la frase, haber dicho al agente que le iba a dar «dos hostias», pero argumenta que «no tenía un tono de agresión ni de amenaza, lo dije en una conversación absolutamente coloquial» y ha pedido disculpas al policía local «por si se pudo sentir ofendido».
Y aunque el agente ha manifestado que «no hay nada personal entre Alfonso Reguera y yo», lo cierto es que el concejal del equipo de gobierno ya tuvo en contra a los sindicatos de la Policía Local tras unas manifestaciones el pasado marzo, cuando en plenas reivindicaciones del cuerpo para pedir la equiparación salarial, aludió a que sus retribuciones están «muy por encima de las de la Guardia Civil y de las de la Policía Nacional y las policías autonómicas», y sus servicios de vigilancia son menores.
La reacción de los sindicatos policiales fue presentarse en el pleno para expresar sus reivindicaciones, a las que unieron, con carteles muy visibles, la dimisión de Reguera. Ahora la piden, o que le cese la alcaldesa, todos los grupos de la oposición.
«Intolerable»
Raquel Fernández, portavoz del Partido Popular, pide a la alcaldesa, Clara Luquero, que cese de sus funciones a Reguera y le exija la dimisión por su «intolerable actitud», por «faltar al respeto» a la Policía Local, cuyo trabajo «despreció» hace unos meses, y ahora por «atacar verbalmente a un agente, demostrando una actitud revanchista e inconcebible en cualquier cargo público».
Añade el PP que «no son suficientes las explicaciones, ni las disculpas, sino que hay que tomar medidas más contundentes» y recalca que la alcaldesa «no puede intentar eludir su responsabilidad ni la de su concejal». Si Luquero no cesa a Reguera, entiende el PP que «comparte el comportamiento reiterado de su concejal», y pedirán la dimisión en el próximo pleno.
Solicitud «formal» de Ciudadanos
El grupo municipal de Ciudadanos registrará este lunes su «solicitud formal» de dimisión de Reguera, que justifica en la «actitud agresiva, violenta y contraria a los valores de respeto y convivencia», y a la que añade su apoyo al «funcionario atacado» y otros miembros de la Policía Local que, según María José García, «han sido maltratados en otras ocasiones por el propio Reguera».
La portavoz de Cs señala «la necesidad de apartar de la vida pública a un concejal que amenaza y mantiene una actitud agresiva», por lo que, si no dimite, la alcaldesa sería «cómplice de esa actitud inaceptable».
Ángel Galindo, concejal de IU, pide explicaciones a la alcaldesa, de manera urgente porque «no es la primera vez que el teniente de alcalde protagoniza una salida de tono», pero añade que, si se confirman las amenazas, «estaríamos ante un caso muy grave y reprobable que debería conllevar responsabilidades políticas».
Para IU es «inconcebible» que un concejal tenga estas actitudes «carentes de civismo». De confirmarse las amenazas al policía, concluye Galindo, «Reguera no podría permanecer ni un segundo como concejal».
Moción posible
A última hora del domingo, el grupo de Centrados en Segovia declaró su intención de promover una moción de censura a la alcaldesa si no decide el cese de Reguera porque «Segovia no merece que siga siendo concejal y dirigiendo los destinos de la ciudad».
El portavoz de Centrados, Cosme Aranguren, destacó que el policía local «tuvo que aguantar el mal carácter, la mala educación, la prepotencia y las amenazas de las que, de vez en cuando, hace gala el concejal Reguera», y recordó que que en noviembre de 2017 la abstención de Ciudadanos «le salvó de la reprobación».