Los precios de las cocochas de merluza, gambas y rape suben un 80% en un mes

En cambio, hay segovianos que desean que sus comensales puedan disfrutar de la mejor calidad y apuran hasta el último día, aunque el coste de la espera sea más caro, a veces el doble por el mismo producto que hace un mes atrás.

La mayoría de clientes que acuden al Mercado Municipal de La Albuera pertenecen a este último grupo, son de los que aguardan hasta casi el último momento, comentan los feligreses y tenderos. Esta clientela suele ser fiel desde hace años, prueba de que la calidad vende. Tienen asumido que los rezagados tendrán que rascarse más el bolsillo.

Quienes están al otro lado del mostrador y atienden los puestos de abastos afirman que, con independencia de la subida de los precios lógica en estas fechas, los que habitualmente adquieren el género en sus tiendas también lo hacen ahora con motivo de los festines navideños.

Si se echa la vista atrás al mes de noviembre, la diferencia de alza en los productos tradicionales de estos días, tanto en carnes como pescados, es considerable. Además, este año se dan unas circunstancias extraordinarias que se dejan notar en los precios. Los temporales de lluvias que se han ido encadenando durante el otoño han encarecido el precio del pescado. Por otra parte, como consecuencia de la peste porcina de China, el cochinillo brilla por su menor oferta y su coste también se ha elevado con respecto a otras épocas. Se ha convertido en uno de los posibles protagonistas más caros. No hay otra opción que ir predispuesto a dejar gran parte del bolsillo.

Pero para muestras de estas tendencias, basten unos botones. Si hablamos del pescado y el marisco, todos los productos se han disparado en un mes. Las cocochas de merluza están al doble, a 90 euros el kilo. En el caso del rape, se encuentra a 55 y la gamba a 68 euros el kilo. Son un 80% más caro. El buey no se ha encarecido tanto, aunque a 22,5 euros la subida se sitúa en torno al 60%. Y si el comensal ha elegido almejas para su menú de Nochevieja tendrá que pagar unos 23,5 euros el kilo, que supone un 50% de lo que costaban hace una semana. Si en su lugar se decanta por el bogavante canadiense, le ha salido un 30% más caro.

Otros reyes en las mesas navideñas son los langostinos, que apenas han variado su precio con respecto al año pasado. El kilo está a 14,8 euros si están cocidos, y a la 27,5 euros si se los llevan crudos. Continuando con los manjares que ofrece el mar, la dorada tampoco ha variado demasiado su precio al ser piscifactoría nacional y su valor es de 11,9 euros el kilo.

Si el comensal se decanta para la cena de Nochevieja por las carnes, el bolsillo no notará gran diferencia con respecto al año anterior. Por ejemplo, una fuente de chuletillas ronda los 15 euros, mientras que el lechazo no llega a los 14 el kilogramo. Uno de los platos por excelencia en las cocinas segovianas, también a la hora de idear el menú de estas celebraciones de fin de año, es el cochinillo. Uno entero cuesta 76 euros, diez euros más que lo que se pagaba en los prolegómenos de la Nochevieja de 2018. El precio de pavo está contenido y se mantiene en 6,90 euros el kilo, sin apenas haber variado en el último mes y año.

En los puestos del Mercado de La Albuera también se encuentran otros alimentos que maridan perfectamente con estas jornadas de fiesta y alta cocina casera y que en muchos hogares también son tradicionales en los platos. Por ejemplo, si eligen servir unas alcachofas, su precio es de 3,45 euros. Por una parte, la popular lombarda de Navidad está a 1,10 euros.

Pero sin duda, la gran estrella para el próximo martes son las uvas, que están a un precio más barato que el año pasado, pero las cajas a uno más elevado si se piden a día de hoy. Se encuentran a 2,35 euros el kilo cuando en 2018 estaban a 2,99. La piña, otro de los clásicos, está a 2,2 euros el kilo, algo más alto que en la ocasión anterior en la que los carteles rondaban entre 1,40.