Mazarías: «El CIDE es un edificio caro y para usarlo hay que pasar por caja»

En la reunión que mantuvieron el pasado lunes, el alcalde obtuvo de la secretaria de Estado de FP, Clara Sanz, el compromiso de plantear una nueva distribución de espacios que permita al Ayuntamiento saber si la instalación del centro educativo es compatible con el anunciado traslado de más de 180 funcionarios municipales al inmueble de la calla Campos de Castilla.

El alcalde de Segovia no oculta que el proyecto en su día anunciado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le genera muchas dudas; para empezar, relacionadas con el espacio. «Ellos dicen que necesitan casi 2.000 metros cuadrados, pero el espacio de superficie construida y administrativamente utilizable es de 2.795 metros cuadrados. Cederles el espacio que piden equivale a cederles el 70%. Nos quedaríamos con el 30%, para dos oficinas en el primer piso, dos en el segundo y dos en el tercero. Lo vemos exagerado, para seis personas fijas que van a trabajar a diario, a las que hay que sumar la veintena de profesores que semanalmente vendrán a formarse», señala el alcalde.

Mazarías quiere que para la cesión medie un contrato estructural que recoja y regule todos estos detalles, también en materia de uso de espacios comunes. «¿Es que los trabajadores del CITAR no van a subir por los ascensores o por las escaleras? ¿Es que no van a utilizar los pasillos? ¿Y el salón de actos? Todas esas dependencias comunes requieren un mantenimiento. Y eso implica un coste. Por lo tanto, hacer un convenio de cesión a coste cero..., pues, mire, no, porque, que yo sepa, la Administración General del Estado no cede un metro de su propiedad de manera gratuita. Así lo dice, al menos, la experiencia que tenemos en Segovia porque pidieron 1,4 millones de euros por el edificio del INSS, después de una rebaja, sin duda generosa, de 400.000 euros, en la época de la alcaldesa Luquero».

El regidor quiere que el CITAR recale en Segovia, y facilitará las cosas, pero defenderá los intereses de la ciudad. «Lo que hemos pedido es que se nos concrete tanto el proyecto como el retorno económico que tiene para la ciudad. Queremos saber cuántas personas van a venir aquí a pernoctar o si la cercanía de la estación del Ave va a servir para que vengan y se vayan todos los días, porque, si es así, no conllevaría ningún beneficio para la ciudad. Y queremos saber qué carteras van a venir, qué empresas van a operar con el centro, cómo van a funcionar las aulas Ateca... ¿Lo van a hacer todas a la vez? ¿Cuánto espacio van a necesitar? Necesitamos concreción, saber más detalles del proyecto; necesitamos saber qué es el CITAR, cómo va a funcionar el CITAR, si para veinte personas a la semana es necesario tener seis aulas Ateca y seis cátedras... No sé cómo va a funcionar eso. Pero, por lo que se ve, el retorno que va a tener para la ciudad no es el que queremos».

Estas y otras fueron las cuestiones que Mazarías trasladó a la secretaria general de FP en la reunión de la semana pasada. «Si lo tienen o no concretado no lo sé», matizó Mazarías. «Por escrito solo nos consta que van a venir seis personas. Nada más. Y eso es muy poco. Por ejemplo, ¿sabemos si solo va a estar ocupado durante la temporada lectiva? ¿Y los tres meses de verano, qué hacemos, cerramos? Hacen falta datos, y sobre todo pasar por caja. ¿Qué hago yo con el 30% del espacio de un edificio que ha costado 30 millones de euros? ¿Qué hago con la cafetería? ¿Qué hago con el parking? ¿Y qué me van a pagar? ¿Solo mantenimiento y seguridad? ¿De cuánto, de esos 1.900 metros de que van a disponer? Por cierto, el salón de actos. ¿Lo van a utilizar? Esporádicamente, me dijeron. Hombre, pero eso tiene un coste... Quiero decir con esto que el CIDE es un edificio magnífico al que debemos sacar la rentabilidad que debemos sacar. Porque, como digo, la Administración General del Estado ni regala ni cede gratuitamente».

En cuanto a plazos, la Secretaría de Estado de FP se ha fijado el primer semestre de 2025 para tener implantado el llamado CITAR, pero el Ayuntamiento de Segovia quiere tener mucho antes la redimensión del proyecto que ha pedido para tomar decisiones. «Mi intención es ocuparlo a lo largo de este año. Por lo tanto, es necesario saber pronto cómo es el proyecto que tienen. Si ellos redimensionan el proyecto, nosotros les comunicaremos el espacio del que dispondrán para ello. Y esperemos que sea compatible con el objetivo que tenemos. Porque nuestra intención es que el CITAR pueda funcionar en el CIDE junto a las oficinas municipales», dijo Mazarías.