La Guardia Civil sorprende a cuatro personas buscando monedas y otras piezas con detectores de metales
Los agentes se incautaron de 35 piezas, entre las que destacan 14 monedas romanas, de los Austrias y los Borbones
En el marco de la operación nacional Pandora VII, destinada a la protección del Patrimonio Histórico y la lucha contra el tráfico ilícito de bienes ... culturales, agentes del Seprona de la Comandancia de Segovia, con base en Coca, han sorprendido en un pinar de Navas de Oro a cuatro vecinos de Madrid que se encontraban realizando prospecciones arqueológicas de manera ilegal con cuatro detectores de metales (pinnpointer), piquetas, palas y otros utensilios. Tras el procedente registro de los cuatro individuos y de su vehículo todoterreno, los agentes se incautaron de 35 piezas metálicas de interés arqueológico, entre ellas monedas, botones y sortijas.
La Guardia Civil ha entregado los objetos al Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León cuyos técnicos han determinado, realizado un primer estudio, que las 14 monedas incautadas constituyen un «conjunto heterogéneo de diversas épocas históricas», pues había desde un as romano hasta monedas más recientes del siglo XX, pasando por acuñaciones pertenecientes a los reinados de los Austrias y de los Borbones. Del resto de las piezas aprehendidas destacan, por su singularidad, un par de gemelos con el escudo de la Casa Real de Borbón en relieve.
La expoliación de bienes culturales es un delito. Por lo ocurrido en el pinar de Navas de Oro se han extendido las correspondientes denuncias administrativas por supuestas infracciones en materia de protección del patrimonio histórico. Los cuatro presuntos expoliadores carecían de autorización para efectuar prospecciones arqueológicas. Tampoco habían comunicado en ningún momento el hallazgo de las piezas, como era su obligación.
Durante el periodo de desarrollo de la presente edición de la operación Pandora, las diferentes Unidades del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Segovia han llevado a cabo un total de 409 vigilancias en los diferentes yacimientos arqueológicos de la provincia, especialmente en aquellos declarados «sensibles, singulares o que han sido objeto de expolios en los últimos años». Fuentes de la propia Guardia Civil recuerdan que este tipo de acciones, efectuadas de forma ilícita, es decir, sin autorización, e independientemente de que el lugar se encuentre catalogado o no, pueden ocasionar «la pérdida irreparable de parte de la información contenida en los estratos arqueológicos, alterar sus contextos y sustraer vestigios históricos, lo que imposibilita cualquier acción posterior para reparar el daño ocasionado».
La legislación vigente prohíbe la realización de actividades arqueológicas sin autorización previa y expresa de la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León. Para la obtención de los permisos, es precisa la intervención de profesioales o equipos que cuenten con la titulación o la acreditación reglamentaria. Como requisito previo para conseguirla, los interesados deben presentar un programa detallado que justifique la necesidad o el interés científico en los trabajos a realizar.
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