El Espinar se afana en recuperarse de las riadas que han anegado garajes, trasteros y calles

Las alertas activadas por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) hacían presagiar lo peor en la jornada del viernes. El miedo a que se reprodujera un caos similar a la que padecieron los espinariegos a raíz del devastador paso de una dana, en septiembre del año 2023, se apoderó de la población, que aún tiene muy reciente los graves destrozos que provocó. El temor estaba justificado al ver cómo el caudal del río Moros no paraba de aumentar empezando a desbordarse en algunos puntos de la zona baja de la localidad. El cúmulo de adversidades e inclemencias fue suficiente para que se activara la alerta por el riesgo grave de inundaciones.

Los pronósticos no fallaron y los augurios se cumplieron. Los peores momentos se vivieron en la mañana del sábado. Las intensas lluvias saturaron el suelo y el crecimiento pertinaz de los caudales que llevan ríos y arroyos se aliaron para desencadenar inundaciones y desbordamientos por todo el municipio, el segundo padrón más grande de la provincia de Segovia. La estación meteorológica situada en el núcleo de San Rafael registró más de 120 litros por metro cuadrado de lluvia en tan solo dos días y más de 270 en la última semana. Una cantidad de agua que ni las tuberías, ni las canalizaciones, ni las alcantarillas pudieron soportar.

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La peor parte del temporal castigó con más fuerza la zona más baja de El Espinar, concretamente en Los Rosales, donde garajes, trasteros y locales han quedado anegados por el embalsamiento del agua que irrumpió por el rebosamiento del río Moros. También ha habido severas dificultades en el entorno de Los Concejos, donde el desbordamiento del caudal provocó grandes balsas en las calles y carreteras. Además, a media mañana del mismo sábado, los accesos al núcleo de El Espinar quedaron cortados en las entradas por las carreteras N-6, N-603 y la SG-500 debido a la crecida descontrolada de dos arroyos.

La jornada de este domingo se ha dedicado a dar continuidad e intensificar las tareas iniciadas horas antes para tratar de solucionar el sinfín de incidencias que había dejado el paso de la borrasca Jana. El alcalde, Javier Figueredo, anunciaba el sábado la puesta en marcha de un dispositivo de emergencia. Por su parte, la Junta también ha acudido en ayuda del municipio segoviano y movilizó la unidad de apoyo logístico. Varios equipos de Protección Civil, personal del Ayuntamiento de El Espinar, Policía Local y Guardia Civil se afanan en las tareas de recuperar las zonas más damnificadas.

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«Ayer [por este sábado] se vivió una situación muy complicada en todo el municipio. Más de quince voluntarios de Protección Civil estuvimos trabajando durante todo el día. Además, la citada unidad de apoyo logístico de la Administración autonómica, diferentes agrupaciones de Protección Civil, Cruz Roja, Policía Local, Guardia Civil, empleados municipales, vecinos y voluntarios, trabajaron incansablemente para minimizar los daños», subraya la concejala del Consistorio y responsable de Protección Civil de El Espinar, Nuria Peña. «Quiero trasmitir todo mi agradecimiento. Ahora toca evaluar los daños y poner soluciones de la manera más rápida posible», apostilla la edil.