Una enfermería agotada reivindica más plantilla pese a las 150 contrataciones de la pandemia
El sindicato Satse en Segovia advierte de los problemas de sustituciones en verano y reclama mejoras para las profesionales de las residencias
La enfermería de la provincia conmemora otro 12 de mayo más la jornada internacional de su profesión, aunque esta vez lo hace «más ... cansada y agotada» que en ediciones anteriores. El coronavirus ha hecho mella en los profesionales, tanto del ámbito sanitario de la Atención Primaria y del Hospital General como en aquellos que desarrollan su trabajo en las residencias. «Ha sido un año muy duro y esto no ha terminado, a pesar del final del estado de alarma», advierte María José Uñón, presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Segovia, quien insiste en el llamamiento a la responsabilidad individual y colectiva de los ciudadanos y no relajar las medidas de protección porque la mortalidad a causa de la infección persiste.
Por su parte, una delegación segoviana del sindicato profesional Satse se ha unido a la concentración que ha tenido lugar en Valladolid este miércoles. Su responsable provincial, Miriam Rubio, coincide con la presidenta colegial en el que la pandemia del coronavirus ha puesto en evidencia «el déficit de plantilla estructural» que arrastra este sector, tanto en el primer nivel asistencial como en el hospitalario y en el sociosanitario.
Esa carencia de profesionales de enfermería se ha enjugado en parte con la contratación por encima de plantilla de algo más de 150 trabajadores, cuyas vinculaciones laborales han sido prorrogadas hasta el 31 de octubre por Sacyl para mantener el nivel de cobertura alcanzado durante la pandemia. Pero para Miriam Rubio, este contingente «sigue sin ser suficiente» para satisfacer la demanda de enfermeros que posee la provincia. De momento, la delegada de Satse ya avanza su preocupación por la cobertura de puestos que pueda producirse durante los meses estivales de vacaciones y de las incidencias como bajas laborales que pueden sobrevenir. Esta inquietud se centra sobre todo en los consultorios de Atención Primaria, donde el déficit de sustituciones es más notorio, apunta la responsable provincia de la organización.
Una de las reivindicaciones que resuena más alto en este Día Internacional de la Enfermería es, precisamente, la petición de ampliar la plantilla orgánica estructural con la que cuenta Segovia, que aún va a verse más exigida en los próximos años por las previsiones de jubilaciones de personal, alerta Miriam Rubio. Para enjugar este problema, es fundamental -tal y como lo han manifestado la responsable sindical y la presidente colegial. la implantación del grado universitario de Enfermería en Segovia. La Junta y la Universidad de Valladolid van dando pasos definitivos para que la oferta de esta enseñanza sea una realidad más pronto que tarde, lo que permitirá tener relevo generacional a las salidas laborales que se sucedan en los próximos años. Pero se impone la urgencia y la rapidez, ya que son estudios de cuatro años y las jubilaciones acechan esas mermadas plantillas. Rubio añade que en torno a veinte profesionales dejarán su puesto por llegar a la edad legal, y en los próximos seis años se espera que se retire uno de cada cinco trabajadores.
«Las grandes olvidadas»
La otra gran reivindicación que preside el llamamiento a la visibilización de la ingente tarea que soporta el colectivo tiene que ver con las condiciones de la enfermería laboral que desarrolla su trabajo en las residencias. La responsable de Satse en la provincia que el problema de las sustituciones en verano se agudice dentro de este sector. Los cálculos de la central sindical indican que la Mixta requeriría entre dos o tres contrataciones más, mientras que la Asistida necesitaría entre cinco y seis incorporaciones. «Son las grandes olvidadas», se lamenta Miriam Rubio, quien señala que las «condiciones retributivas de este personal son peores que las de las enfermeras de Sacyl». «No se valora las responsabilidades que tienen», se queja la delegada de la central profesional, que también hace hincapié en el desgaste físico y psíquico que arrastra este colectivo durante la crisis detonada por la pandemia.
La reclamación de visibilidad que envuelve al día internacional también está dirigida a las enfermeras que desempeñan su atribución en el ámbito educativo, y concretamente en el caso segoviano en el centro de enseñanza especial Nuestra Señora de la Esperanza.
Asimismo, Satse Segovia reitera la demanda de mejoras en la conciliación de la vida laboral y familiar de los profesionales de enfermería, circunstancia que afecta sobre todo al personal eventual, que «muchas veces no sabe los turnos de trabajo que van a tener dentro de quince días».
La concentración de esta mañana a las puertas del Hospital General de Segovia ha guardado un minuto de silencio por todos los sanitarios que han fallecido durante la pandemia de la covid-19. Una vez terminado este homenaje, los asistentes han roto en un emocionante aplauso.
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